JOHANNESBURGO.- La policía de Sudáfrica y el partido gobernante Congreso Nacional Africano, ANC (por su sigla en inglés), intensificaron este martes sus esfuerzos para sofocar la violencia contra extranjeros y un ministro dijo que los disturbios podrían dañar el sector clave del turismo.
Al menos 24 personas murieron durante una semana de ataques violentos contra trabajadores inmigrantes africanos, a quienes muchos en los municipios pobres de Sudáfrica acusan de robar empleos y alimentar una ola de delitos violentos.
El ministro de Turismo de Sudáfrica dijo que la violencia podría perjudicar al sector, que contribuye con alrededor del 8 por ciento del Producto Bruto Interno de la mayor economía de Africa, emplea a 1 millón de personas y el año pasado atrajo a 8,4 millones de visitantes.
"Los africanos viajan cada vez más a Sudáfrica como destino de vacaciones y estos ataques tienen el potencial de impactar ciertamente de manera negativa en dicho mercado si esto es lo que la gente ve en sus pantallas y escucha en sus radios," dijo a periodistas Marthinus van Schalkwyk.
Miles de extranjeros han huido a refugios desde que el 11 de mayo comenzó la violencia en el municipio de Alexandra.