BOGOTÁ.- La Iglesia Católica y dirigentes políticos colombianos destacaron el pronunciamiento hecho hoy por el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, quien pidió a la guerrilla de las FARC que libere a los rehenes sin condiciones y afirmó que en este tiempo no se justifican los movimientos guerrilleros en América Latina.
Según el secretario general de la Conferencia Episcopal de Colombia, monseñor Fabián Marulanda, las palabras de Chávez fueron "sensatas y racionales".
"Lo único que uno podría pensar es que todo esto corresponda a un deseo muy sincero y a un cambio en la mentalidad no solamente del presidente Chávez sino de muchas otras personas que de una u otra manera le han venido haciendo el juego a la subversión", dijo Marulanda en declaraciones a cadena radial Caracol.
El obispo señaló que la Conferencia Episcopal sigue buscando un contacto con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para conseguir un canje de rehenes por rebeldes presos, pero prefirió no ahondar en detalles.
"La Iglesia en eso ha mantenido mucha discreción, un perfil de mucha reserva. Así como hay otras políticas en el sentido de publicitar cuánto se hace y se dice, la Iglesia considera que es preferible un camino de mucha discreción en eso", dijo.
Por su parte, el representante a la Cámara Mauricio Lizcano, del oficialista Partido Social de Unidad Nacional (U) e hijo del ex congresista àscar Lizcano, uno de los rehenes de las FARC, dijo que el pronunciamiento del presidente venezolano es "positivo".
"Ha entendido que hay una nueva realidad política en el mundo frente a grupos como las FARC, los paramilitares y el terrorismo. Esperemos que las FARC entiendan y escuchen esta petición del presidente Chávez que ha sido, entre comillas, un aliado ideológico", expresó Lizcano.
El senador Gustavo Petro, del partido opositor de izquierda Polo Democrático Alternativo (PDA), afirmó que Chávez rectificó su posición y ahora reconoce que se equivocó al decir que las FARC deberían tener estatus de beligerancia.
A su turno, la ex ministra de Defensa y ahora senadora Martha Lucía Ramírez, del partido de la U, sostuvo que en la intervención de Chávez hay "un cambio notable".
"Me parece que eso es lo que el presidente (Chávez) ha debido decir desde hace varios años. Desafortunadamente, sólo viene a decirlo ahora cuando está tan presionado por toda la información que se ha conocido a través del computador de 'Raúl Reyes'", dijo Ramírez.
"Yo creo que es importante que sea él, una persona que ha estado tan cerca a las FARC, el que le haga caer en cuenta a 'Alfonso Cano' (el nuevo jefe del grupo) que no es por la vía de las armas por la cual ellos podrán tener algún tipo de participación política", agregó Ramírez.
Chávez criticó el secuestro de civiles y militares por parte de las FARC y dijo que eso se lo quiso decir "Manuel Marulanda Vélez", quien fuera el jefe del grupo por cuatro décadas y murió en marzo pasado y que ahora se lo plantea a "Cano", su sucesor.
"La guerra de guerrilla pasó a la historia y ustedes en las FARC deben saber una cosa: ustedes se han convertido en una excusa del imperio para amenazarnos a todos, son la excusa perfecta. El día que se haga la paz en Colombia se le acabó la excusa al imperio, la principal que tiene, el terrorismo", afirmó en su programa "Aló presidente".
"Tener en una montaña a un grupo de gente, sobre todo civiles y también militares. No es lo mismo que estar en una cárcel. Yo estuve preso dos años y medio (por el intento golpista de 1992), pero todos los días venía mi mujer y los viejos los fines de semana.
No es lo mismo estar preso a estar en una montaña. Yo creo que llegó la hora de que las FARC liberen a todos los que tienen allá en la montaña, sería un gran gesto humanitario, a cambio de nada", añadió Chávez.
