TOKIO.- El Grupo de los Ocho países más industrializados (G8), divididos sobre el calentamiento climático, no fijará una meta a mediano plazo para reducir las emisiones de gases con efecto invernadero en su cumbre de julio en Japón, afirmó hoy el primer ministro nipón, Yasuo Fukuda.
"El principal desafío para las negociaciones de la ONU que se llevarán a cabo hasta fines de 2009 es ponerse de acuerdo en un objetivo a mediano plazo", para encontrar un sucesor al protocolo de Kyoto, explicó Fukuda en una entrevista otorgada a agencias de prensa de los países del G8, entre ellas la AFP.
Según él, "el G8 no es el lugar para ponerse de acuerdo en ese objetivo". En diciembre pasado se abrió una negociación bajo la égida de las Naciones Unidas para encontrar, antes de diciembre de 2009, un sucesor para el protocolo de Kyoto sobre la reducción de emisiones de gases con efecto invernadero responsables del calentamiento climático. Este acuerdo expira en 2012.
Estados Unidos, único país industrializado que no ratificó ese protocolo, advirtió que sólo se podrá encontrar una solución al calentamiento climático involucrando a los países emergentes, como China e India, y a los países en vías de desarrollo.
Estados Unidos afirmó además que el G8 no es el marco adecuado para fijar objetivos a mediano plazo para la reducción de emisiones.
Del 7 al 9 de julio se realizará en Toyako (norte de Japón) la cumbre del G8 (Estados Unidos, Japón, Alemania, Gran Bretaña, Francia, Italia, Canadá y Rusia). Una de sus prioridades será la lucha contra el calentamiento climático.
Por otra parte, Japón invitó a los dirigentes de ocho grandes países emisores de gases con efecto invernadero, incluyendo Brasil, China e India, a una reunión de 16 Estados sobre el calentamiento climático, el 9 de julio.
Los defensores del medio ambiente presionan a los grandes países contaminantes para que fijen rápidamente objetivos precisos a mediano plazo.
Durante su cumbre anual realizada el año pasado en Alemania, los países del G8 se pusieron de acuerdo en "estudiar seriamente" la reducción en al menos 50% hacia 2050 de las emisiones, sin fijar un objetivo más cercano.
Sólo la Unión Europea se comprometió a reducir en 20% sus emisiones para 2020.
Fukuda anunció a principios de junio un objetivo de reducción de 60% a 80% para 2050 de las emisiones de dióxido de carbono (CO2), el gas con efecto invernadero más emitido del planeta.
También señaló que Japón podría reducir en 14% sus emisiones de CO2 entre 2005 y 2020, pero sin prometer nada.
Otro de "los principales centros de atención" de la cumbre del G8 será mejorar la asistencia médica, afirmó Fukuda.
"Estados Unidos también está muy interesado en que se tomen medidas sobre enfermedades infecciosas en Africa", añadió.
"Todos están interesados en esta cuestión, de modo que ahora es un desafío mundial", explicó.
Al ser interrogado sobre la situación económica japonesa, Fukuda excluyó cualquier medida fiscal para dar un nuevo impulso al crecimiento, señalando que su país, que está muy endeudado, no podía permitírselo.
En cuanto a la situación internacional, el jefe de gobierno nipón dijo que su país no tiene intenciones de enviar tropas terrestres a Afganistán a breve plazo, debido a su Constitución pacifista.
Fukuda se mostró partidario de "una relación normal" con Corea del Norte, después de años de tensiones relacionadas con el programa de armamento nuclear de ese país y el secuestro de japoneses durante la Guerra Fría.
El viernes pasado, Japón anunció que levantaría parcialmente las sanciones comerciales contra Corea del Norte a cambio de la apertura de una investigación sobre los japoneses desaparecidos.
A pesar de las presiones de la oposición para que el Parlamento sea disuelto, el primer ministro afirmó que no habrá elecciones legislativas anticipadas antes de las previstas en setiembre de 2009.
