LA PAZ.- El gobierno de Bolivia expresó este jueves su preocupación por la "injerencia" en este país del embajador de Estados Unidos, Philip Goldberg, quien fue llamado por Washington en consulta, después de que miles de vecinos asediaran la legación diplomática la semana pasada.
"Nosotros también tenemos la preocupación como país del resguardo de nuestra soberanía, frente a la injerencia política que algún embajador, concretamente el señor Philip Goldberg, ha estado efectuando en los últimos meses en Bolivia", afirmó el ministro de Gobierno (Interior), Alfredo Rada.
El diplomático estadounidense, quien inició sus gestiones en octubre de 2006, fue sindicado por el presidente izquierdista Evo Morales de comandar una "conspiración" civil y empresarial de derecha.
Goldberg fue llamado el lunes por el Departamento de Estado que manifestó su preocupación por la destitución de un jefe policial que dirigió el resguardo de la legación de Estados Unidos, cuando fue acechada hace una semana por miles de vecinos de la ciudad de El Alto.
Los manifestantes marcharon alrededor de la embajada por varias horas, en protesta por la decisión de Washington de otorgarle asilo político al ex ministro de Defensa, Carlos Sánchez Berzaín, acusado en Bolivia por la muerte de unas 60 personas en octubre de 2003, en revueltas sociales.