VIENA.- El comandante supremo de la OTAN para Europa, el general estadounidense John Craddock, dijo hoy que la Alianza requiere mayor flexibilidad en sus tropas y más medios aéreos en Afganistán para hacer frente a la insurgencia talibán.
Craddock, que asiste a la conferencia de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), en Viena, dijo a los periodistas que se necesitan helicópteros, aviones espías no tripulados y otros equipos de transporte para mejorar la movilidad de las fuerzas internacionales.
Sobre el número de aparatos adicionales que necesitarían para trasladar a las tropas, no quiso entrar en detalles pero dijo que se trataría de un aumento “sustancial,” y explicó que la OTAN ha tenido que llegar a alquilar helicópteros al no tener un número suficiente.
A la pregunta de si le gustaría ver tropas españolas en el sur de Afganistán, el general contestó que sí, pero agregó que “tenemos una Alianza. Países que tienen un interés nacional. Debido a esto, los países deciden el nivel de su contribución”.
"Nos gustaría ver un aumento de las contribuciones,” explicó, pero precisó que no quería centrarse “tanto en un número, sino en la capacitación. Es más importante tener un incremento en la capacidad de transporte con helicópteros que dos batallones de infantería”.
Acto seguido, Craddock criticó las limitaciones de las tropas internacionales, tanto en el espacio (contingentes asignados sólo a determinados territorios) como funcionales (tropas que no pueden realizar cierto tipo de operaciones).
"Esto limita la flexibilidad” de los efectivos, dijo Craddock, para agregar que quiere “ver una reducción” o incluso una completa eliminación de esas restricciones.
Craddock también achacó una mayor actividad insurgente en algunos distritos del sur de Afganistán con “una pérdida de control de la frontera desde el lado paquistaní. Creemos que es esencial que el Ejército paquistaní, el Gobierno, retome el control”.
El militar explicó que la lucha contra la insurgencia en Afganistán no se solucionará sólo con medios militares, sino que debe de decidirse con las labores de reconstrucción y desarrollo del país.
La Fuerza de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF), bajo mando de la OTAN, cuenta con unos 34.000 efectivos de 37 países.