CONNECTICUT.- Un hombre acusado de haber matado a su novia embarazada frente a los dos hijos de ambos se suicidó en su celda, dijo un funcionario de la prisión estatal.
Alfredo Ferrer, de 43 años, al parecer se colgó con una sábana, señaló Brian Garnett, vocero del Departamento de Correccionales.
Al preguntársele si los guardias habían realizado la requerida revisión dos veces por hora a cada celda, respondió: "Está bajo investigación y todo será determinado".
La muerte de Ferrer ocurre un mes después de que un juez determinó que existía evidencia suficiente para que fuera juzgado. El tenía que comparecer ante la corte el viernes.
Ferrer fue acusado de disparar el 14 de abril a Amanda Realie, de 27 años, en el apartamento de ambos. Realie falleció tres días después, y los médicos no pudieron salvar al bebé no nacido.
Agentes de Coventry arrestaron a Ferrer el día de la balacera luego de que la policía rodeara la taberna donde trabajaba como lavaplatos.
La policía dijo que lo encontró salpicado de sangre, con una pistola y con su hijo de 2 años, amenazando con matarse. Vecinos señalaron que su hijo de 5 años estaba a su lado.
Los agentes sometieron a Ferrer con una pistola inmovilizadora y los niños no resultaron heridos. Empleados de la taberna habían llevado a sus clientes al sótano durante la redada policial.
Investigadores dijeron que Ferrer les dijo después que le disparó accidentalmente a Realie mientras peleaban por la adicción de ella a la heroína y los antecedentes de él como agresor sexual.