CALIFORNIA.- John McCain dijo hoy que la perforación para extraer petróleo frente a las costas del país es una parte esencial de cualquier plan para disminuir los precios de la gasolina y reducir la dependencia de fuentes extranjeras, y criticó a su rival demócrata Barack Obama por oponerse a ello.
"Todos sabemos que una solución integral es el viento, las mareas, el sol y todas las otras cosas en las que todos creemos", dijo el candidato presidencial republicano luego de visitar San Joaquin Facilities Management, una compañía petrolera en el desierto de California que produce 1.100 barriles de petróleo diarios.
"Entretanto, mientras desarrollamos todas esas fuentes alternas de energía, será vital que continuemos la producción petrolera a un nivel alto, incluida la perforación en alta mar", apuntó.
McCain llamó a Obama el "Dr. No" de la energía; pero el republicano también lo fue alguna vez.
Apenas el mes pasado, McCain cambió de opinión tras oponerse durante años y pidió suspender la prohibición federal a la perforación en el mar territorial estadounidense.
El senador por Arizona promueve el desarrollo energético como un medio de impulsar la economía, y una encuesta reciente encontró muchos votantes abiertos a la explotación de los yacimientos de crudo en el mar como un medio para bajar los precios de la gasolina.
Pero los puntos de vista de McCain podrían ser molestos en California, estado que ha tenido catastróficas perforaciones en el mar debido a derrames.
El gobernador republicano Arnold Schwarzenegger, un aliado de McCain, se opone a tales perforaciones y ha hablado sobre trabajar un día en el gobierno de Obama como "zar de la energía".
Obama se opone a la perforación en aguas territoriales y dice que permitir la exploración ahora no tendría un impacto en los precios de la gasolina al menos en cinco años.
El vocero Hari Sevugan señaló que el programa energético de Obama, entre otras cosas, obligaría a las compañías petroleras a perforar en áreas que ya han arrendado del gobierno.
McCain también insistió en que existe la tecnología para llevar rápidamente al mercado el petróleo extraído de yacimientos marinos, aun cuando el gobierno federal ha calculado que tomaría años para obtener resultados de las nuevas exploraciones en el mar.