BRASILIA.- El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, viajará mañana domingo a Argentina para una visita oficial de dos días, en la que se reunirá con la presidenta de ese país, Cristina Fernandez de Kirchner, con el objetivo de avanzar en acuerdos relativos al comercio bilateral.
La "visita de trabajo", según la calificó el ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil, se realizará como respuesta a una invitación formulada por la mandataria argentina, y se centrará en las relaciones comerciales y económicas de los mayores socios del bloque regional Mercosur, que integran junto a Paraguay y Uruguay.
Durante la estadía de Lula en el país vecino, ambos presidentes participarán de la apertura del seminario empresarial Brasil- Argentina, en el cual se discutirán las inversiones recíprocas y el proceso de integración regional.
También está prevista la realización de reuniones sectoriales con empresarios y representantes de gobierno de ambos países, que tendrán como objetivo estimular la integración de las cadenas productivas de ambos paíes en diversos sectores, como la industria automotriz, los bienes de capital y máquinas agrícolas, la industria naval, "software", química y petroquímica, textil, público financiero, pequeñas y medianas empresas, alimentos y bebidas, turismo y biocombustibles.
Uno de los puntos más importantes que deberán abordar los empresarios será el expresivo aumento del comercio bilateral, que entre enero y junio de 2008 creció cerca de un 35 por ciento con relación al mismo periodo de 2007. La perspectiva para este año es que el intercambio comercial entre ambas naciones alcance la cifra récord de 30.000 millones de dólares antes de fin de este año.
El mandatario brasileño llegará a la capital Buenos Aires a las cuatro de la tarde, hora local, donde mantendrá una reunión de coordinación con la prensa brasileña, debidamente acreditada.
El lunes, Lula da Silva almorzará con Cristina Fernandez en la Casa Rosada, tras lo cual regresará a su país.
Según versiones de prensa, el mandatario brasileño intentará, durante su viaje, restaurar las relaciones con su principal socio del Mercosur, tras los resquemores dejados por las fracasadas negociaciones de la Ronda Doha de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Las relaciones entre Brasilia y Buenos Aires quedaron afectadas la semana pasada por la decisión del canciller brasileño, Celso Amorim, de aceptar una propuesta de la Organización Mundial del Comercio (OMC), para lograr un acuerdo en la Ronda Doha, cuyas bases eran rechazadas por Argentina.
En el campo de las relaciones bilaterales, Lula pretende avanzar en Buenos Aires en la creación de un fondo brasileño-argentino de apoyo a las pequeñas y medianas empresas (PYMES), con un aporte inicial de 50 millones de dólares.
Además, debatirá con Kirchner la adopción de tarifas aeroportuarias especiales y trato diferenciado para viajeros de los dos países, además de la flexibilización de normas sobre vuelos regionales para estimular el turismo bilateral.
También se baraja la posibilidad de que Argentina adquiera aviones de la fábrica brasileña Embraer para ampliar la flota de la recién nacionalizada Aerolíneas Argentinas, que enfrenta una grave crisis financiera, causada en parte por la escasez de aeronaves.
Si las negociaciones son exitosas, la compra de los aviones brasileños podría ser financiada por el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES), el organismo estatal de fomento de Brasil.
