BUENOS AIRES.- El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, arribó hoy a Buenos Aires junto a 264 empresarios y buena parte de su gabinete para reunirse con su par argentina, Cristina Fernández, y participar de un encuentro de negocios.
El mandatario brasileño llegó a las 22.20 horas (local) al sector militar de Aeroparque, donde fue recibido por el canciller argentino, Jorge Taiana.
Vestido con ropa informal, Lula abordó un automóvil que lo llevó a la Embajada de Brasil en Argentina, donde esta noche cenará con Fernández y su esposo, el antecesor presidencial Néstor Kirchner.
Ambos mandatarios prevén mantener además una “minicumbre” junto al presidente de Venezuela, Hugo Chávez, quien arribará el lunes por la tarde a la capital argentina, aunque el encuentro no figura aún en la agenda oficial de Da Silva.
El viaje de Lula se produce luego de las posiciones enfrentadas de Argentina y Brasil sobre la apertura de mercados industriales durante las frustradas negociaciones en la Organización Mundial de Comercio (OMC).
El Gobierno argentino intentó este viernes bajar el tono a la disputa, al asegurar que buscará acordar con el país vecino “una sola voz” ante la OMC.
Portavoces oficiales indicaron que Fernández y Lula tendrán “una agenda abierta” durante los encuentros que mantendrán entre hoy y mañana, aunque estimaron que las negociaciones ante la OMC formarán parte del temario.
El lunes, Da Silva compartirá un desayuno con empresarios de su país en la sede diplomática y luego volverá a encontrarse con Fernández para inaugurar el seminario “Argentina-Brasil: una alianza productiva clave,” en el marco del encuentro empresario binacional para el desarrollo de estrategias de cooperación y articulación productiva, que se realizará en un hotel porteño.
Después se reunirá en privado con Fernández y, más tarde, ambos almorzarán en la cancillería argentina junto a numerosos empresarios.
Por parte de Argentina, confirmaron su presencia más de mil empresarios, mientras que de Brasil, a los 264 hombres de negocios que arribaron con Lula, se agregarán otros que ya se encuentran en el país, con lo que sumarán más de 350 ejecutivos de compañías brasileñas.