TEHERÁN.- Irán tampoco dio respuesta hoy a la oferta de la comunidad internacional para superar el conflicto sobre el programa nuclear del gobierno de Teherán.
Un funcionario iraní de alto rango contó hoy a la agencia de noticias ISNA que el contenido de la carta que el embajador iraní en Bruselas envió al Consejo de ministros de la Unión Europea no tenía relación con la oferta emitida por China, Alemania, Francia, Reino Unido, Rusia y Estados Unidos.
Más bien, se trataba de una transcripción de la conversación telefónica mantenida entre el jefe de la diplomacia europea, Javier Solana, y el negociador jefe iraní, Said Yalili.
Los cinco miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y Alemania instaron el 19 de julio en Ginebra a Yalili a dar una "respuesta clara" a la oferta "en aproximadamente dos semanas".
Sin embargo, funcionarios del gobierno afirmaron en Teherán que no existe "ningún plazo" para la contestación: Irán desea continuar las conversaciones con el grupo de seis países.
Por otro lado, la agencia de noticias Fars informó hoy que Irán sí presentó su respuesta a la oferta de los líderes mundiales para resolver el conflicto nuclear.
Estados Unidos advirtió el fin de semana que se podrían recrudecer de nuevo las sanciones acordadas por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas en caso de que Irán no ceda en su empeño nuclear.
El gobierno iraní anunció que el jueves espera la visita a Teherán del inspector jefe del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Olli Heinonen.
La agencia ISNA no aclaró si Heinonen y sus acompañantes inspeccionarían las instalaciones nucleares iraníes. Los cinco miembros del Consejo más Alemania ofrecieron a Irán una amplia cooperación económica y ayuda en el desarrollo de tecnología atómica civil a cambio de que detenga su programa de enriquecimiento de uranio, pues temen que Teherán esté desarrollando armas nucleares. Teherán siempre lo desmintió.
El comandante de la organización paramilitar Guardianes de la Revolución, el general Mohammad Ali Yafari, ratificó su amenaza de que Irán bloquee por tiempo indefinido el estrecho de Ormuz, el más importante del mundo para el suministro de petróleo, en caso de que Israel o Estados Unidos ataquen instalaciones nucleares iraníes.
Irán sería capaz de detener el tráfico marítimo gracias a sus nuevos misiles, afirmó Yafari.
