BOGOTÁ.- El hijo mayor de quien fuera el principal narcotraficante del mundo en los años 80 y 90, Pablo Escobar, pidió perdón a la familia del dirigente político colombiano Luis Carlos Galán por la orden que dio su padre para asesinarlo, informa hoy el diario "El Tiempo" de Bogotá.
La carta fue enviada en enero pasado por Juan Pablo Escobar a los hijos de Galán y de Rodrigo Lara, quien en 1984 fue asesinado por el cartel de Medellín cuando era ministro de Justicia, con el objetivo de acabar los odios entre las familias.
La información se conoce en la víspera de la conmemoración de un nuevo aniversario del asesinato de Galán, cometido el 18 de agosto de 1989, que conmocionó al país porque en ese momento el líder político era visto como probable ganador de las elecciones presidenciales de 1990.
Tras cometer varios de los peores ataques terroristas en la historia de Colombia, Escobar fue abatido por las autoridades en diciembre de 1993. Su familia emigró después a Argentina y su hijo mayor cambió su identidad por la de Sebastián Marroquín, con el objetivo de iniciar una nueva vida.
Aunque "El Tiempo" no publicó la carta, sí confirmó la existencia de la misma con los hijos del político: Claudio, Carlos Fernando y Juan Manuel Galán. Los dos últimos heredaron la vena política de su padre y se desempeñan como concejal de Bogotá y senador, respectivamente.
Según el diario, la carta fue leída al mismo tiempo por los tres hermanos Galán, Rodrigo Lara, hijo del ministro asesinado, y el congresista Simón Gaviria, hijo del ex presidente César Gaviria (1990-94), en cuyo gobierno se desvertebró el cartel de Medellín.
Los jóvenes políticos que participaron en la reunión hicieron comentarios positivos de la carta y prometieron no revelar detalles de la misma.
Sin embargo, el hijo del narcotraficante no ha recibido respuesta y los hijos de Galán consideran que no es el momento de expresar un perdón hasta que haya concluido el proceso penal contra el ex candidato presidencial, ex congresista y ex ministro Alberto Santofimio, condenado por el crimen.
Santofimio fue sentenciado el año pasado a 24 años de cárcel, tras ser declarado culpable de influir en el cartel de Medellín para el asesinato de Galán, quien proponía en su campaña una persecución sin contemplaciones contra los narcotraficantes.
La defensa de Santofimio apeló la sentencia y se espera que el fallo se conozca en los próximos meses.
"Estamos dispuestos a perdonar, pero siempre y cuando haya justicia, porque perdón sin justicia es sinónimo de impunidad y eso, para nosotros, no es un verdadero perdón", dijo a "El Tiempo" uno de los hermanos Galán.
