MOSCÚ.- El primer ministro Vladimir Putin acusó este jueves a Estados Unidos de instigar el conflicto en Georgia y dijo que sospechaba de un vínculo con la campaña presidencial estadounidense, en una argumentación que la Casa Blanca desechó como “claramente falsa”.
Además, Putin ordenó que a 19 productores estadounidenses de aves de corral se les prohiba vender sus productos en Rusia y afirmó que la decisión no estaba relacionada con la situación en las relaciones Rusia-Estados Unidos.
Señaló que las empresas, sin identificarlas, ignoraro la exigencia de que corrigieran deficiencias.
Putin, ex Presidente ruso y arquitecto de una política exterior enérgica que ha ocasionado tensión entre Oriente y Occidente, sugirió en una entrevista con la cadena de televisión CNN que había una presencia estadounidense en el conflicto en Georgia con un posible móvil en la política interna de Estados Unidos.
“Tenemos serios motivos para pensar que hubo ciudadanos norteamericanos justo en la zona de combate” durante el conflicto de Rusia con la ex república soviética ahora aliada de Estados Unidos, dijo Putin en la entrevista transmitida en la televisión estatal rusa. “Y si eso fue así, si se confirma, sería muy malo. Sería muy peligroso”, agregó.
El acre ataque de Putin a Estados Unidos ocurrió mientras la propuesta de Moscú de reubicar las líneas fronterizas de Georgia enfrentó un obstáculo con sus aliados asiáticos, quienes se negaron a reconocer a las dos regiones separatistas de Georgia que apoya Rusia.
Francia, entre tanto, dijo que la Unión Europea está considerando sanciones contra Rusia por su conducta en el Cáucaso.
Putin dijo que Rusia había esperado que Estados Unidos hubiera contenido a Georgia, a la que Moscú acusa de haber comenzado el conflicto al atacar a Osetia del Sur el 7 de agosto. En cambio, insinuó, Estados Unidos alentó a las autoridades de esa nación a tratar de tomar por la fuerza el control de la región separatista.
“La parte estadounidense, de hecho, armó y entrenó al ejército georgiano”, afirmó Putin.
“¿Para qué sostener años de difíciles negociaciones y buscar complejas soluciones negociadas en conflictos interétnicos? Es más fácil armar a una parte y empujarla al asesinato de la otra parte, y se acabó”, enfatizó.
“Parece una solución sencilla. En realidad resulta que no siempre es así”, agregó.
