TEHERÁN.- El presidente de Irán, Mahmud Ahmadinejad, advirtió que su país se defenderá de cualquier agresión en un discurso que pronunció el domingo durante el desfile de las fuerzas armadas, en un momento en el que Teherán intensifica sus ambiciones nucleares.
"Todo el mundo sabe que si alguien se atreve a cometer la más mínima agresión contra el territorio y los intereses legales de Irán, nuestras fuerzas armadas (...) le romperán la mano antes incluso de que apriete el gatillo y harán que lo lamente", declaró.
"El pueblo iraní quiere la paz y la amistad (...), pero actualmente no está en posición de mostrar la mínima flexibilidad ante sus amenazantes enemigos", añadió.
Estas declaraciones de Ahmadinejad eran parte del discurso pronunciado durante el desfile anual que se organiza por el aniversario de la guerra entre Irán e Irak (1980-88), que dejó más de un millón de muertos, según las estimaciones occidentales.
El ex jefe del ejército israelí, Moshe Yaalon, aseguró a la radio militar que las amenazas de Irán a Occidente son comparables a las de Adolf Hitler y que el conflicto será "inevitable" si fracasan las sanciones económicas y políticas al régimen de Teherán.
"Aún podemos detener a Irán con medidas políticas y económicas, pero si no, la confrontación bélica será inevitable", aseguró.
El discurso del líder iraní, además, se produjo en la víspera de una reunión de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) en la que se discutirán los escasos avances en el plan de verificación del objetivo real del programa nuclear iraní.
El organismo de control de la ONU ha estado investigando el programa nuclear de la República Islámica durante los últimos cinco años, sin que por el momento haya sido capaz de determinar si el fin último del programa es pacífico, tal como argumenta Irán.
Por el momento, las negociaciones entre la AIEA e Irán están, en palabras de un alto responsable del organismo, "paralizadas" por la negativa de Teherán a proporcionar pruebas de que no participó en los estudios por construir ojivas nucleares, tal como denuncian diferentes servicios de inteligencia.
Irán insiste en que la finalidad de su programa nuclear es la producción de energía eléctrica y ha advertido en repetidas ocasiones de represalias contra cualquier ataque a su territorio.
Durante el desfile del domingo de las fuerzas armadas iraníes, que incluyó a la Guardia Revolucionaria, el cuerpo de élite, Irán exhibió su poderío armamentístico.
En el desfile se mostraron misiles Shahab-3 y Ghadr-1 con un alcance de 2.000 km, según un comentarista oficial.Hace un año, Irán ya había presentado un ejemplar del misil de largo alcance Ghadr-1, del que se dijo que tenía un alcance de 1.800 km.
Estos misiles son capaces de alcanzar el territorio israelí, que se encuentra a unos 1.000 km de la frontera de Irán.
En una pancarta situada en un camión del desfile que transportaba varios tipos de misiles se podía leer la inscripción: "Israel tiene que ser eliminado del universo".
Otras pancartas decían: "muerte a Estados Unidos" y "muerte a Israel".