Sin problemas comenzó referendo en Ecuador

QUITO.- Ecuador acudía el domingo a las urnas para pronunciarse sobre la nueva carta magna que impulsa el Presidente Rafael Correa, a quien los sondeos dan ventaja para aprobar un texto con el que busca acelerar sus reformas socialistas en la volátil nación andina.

Desde los remotos pueblos indígenas de la Amazonía hasta las exóticas Islas Galápagos, casi 10 millones de ecuatorianos están llamados a votar en un referendo que podría marcar un histórico giro a la izquierda, al que se oponen la Iglesia Católica, gremios empresariales y la debilitada oposición.

De confirmarse las encuestas, Correa afianzaría su estabilidad al frente del país de 14 millones de habitantes que ha visto caer a tres presidentes en la última década en medio de violentas protestas populares.

"Realmente, creo que ésta es la última oportunidad de un cambio pacífico en el Ecuador", ha advertido el carismático gobernante de 45 años durante la campaña, marcada por el duro enfrentamiento verbal y mediático con sus oponentes, pero sin violencia en las calles.

La nueva Constitución consagra un mayor el control del Estado sobre sectores estratégicos de la economía, basada en las exportaciones de crudo y las remesas de los emigrantes, y amplía los poderes ejecutivos del mandatario.

Sin embargo, los críticos de este ex profesor universitario formado en Estados Unidos y Europa advierten que el texto otorga unas atribuciones excesivas a un líder que consideran "dictatorial" y "prepotente".

Tras 20 meses en el poder, Correa conserva elevados niveles de popularidad, sobre todo entre la mayoría pobre del país a la que ha destinado multimillonarios proyectos sociales financiados con la renta petrolera, un factor que analistas consideran clave en los comicios del domingo.

Por su parte, la dispersa oposición podría lograr una simbólica victoria en la ciudad porteña Guayaquil, su fortín electoral, desde el que promete resistir el "socialismo autoritario" del Gobierno llamando a la desobediencia civil.