MANILA.- Los equipos de rescate encontraron los cadáveres de otros dos mineros que seguían atrapados en una mina abandonada en el norte de Filipinas desde hacía diez días, mientras se reducen las esperanzas de encontrar con vida a la única víctima que todavía permanece en el interior, informó hoy la prensa local.
"Estamos concentrando todos nuestros esfuerzos en encontrar al último minero que está dentro de la excavación”, dijo el oficial de la Oficina Estatal de Minas y Geociencia, George Baywong.
"Queremos a todos los mineros fuera, vivos o muertos”, señaló, pero "basándonos en los informes obtenidos en el terreno, hay muy pocas oportunidades de encontrarle con vida”, explicó el teniente coronel, Edgard Arevalo.
El pasado 22 de septiembre, un grupo de 16 personas quedaron atrapadas en el interior de una mina en Itogon, en la provincia de Benguet, a unos 220 kilómetros al norte de Manila.
La explotación de oro pertenece a la minera Benguet Mining Corporation, que abandonó el lugar en la década de los 90.
La compañía había vallado los accesos pero los mineros, que trabajaban ilegalmente, abrieron un pasadizo de acceso y se introdujeron en la propiedad para extraer el mineral por cuenta propia.
El yacimiento colapsó a causa de las intensas lluvias provocadas por el tifón “Hagupit”, el lunes de la semana pasada, y dejó atrapados en sus túneles a los 16 mineros.
Las inundaciones dificultaron las labores de los equipos de rescate, que han logrado sacar a nueve personas con vida y siete cadáveres.
