GUATEMALA.- El ex Presidente guatemalteco Alfonso Portillo no podrá ser procesado en su país por otro delito que no sea el de malversación, a pesar de que existen más de una decena de acusaciones de actos de corrupción en su contra, informó hoy una fuente oficial.
El fiscal contra la Corrupción, Omar Contreras, dijo a periodistas que el Tratado de Extradición vigente entre México y Guatemala, el cual permitió la repatriación de Portillo el martes, impide que sea procesado en el país por otros delitos u otros casos que no sean los señalados en la petición de extradición.
"Estamos analizando los casos, por lo que vemos no se podrá (incluir otros delitos ni otros procesos), ya que la extradición la solicitamos solo por peculado, y no debemos violar el tratado", precisó Contreras.
El ex Mandatario, quien gobernó el país entre 2000 y 2004, fue extraditado el martes de México, a petición de la Justicia guatemalteca, que en la solicitud de repatriación argumentó el desvío ilegal de unos 120 millones de quetzales (15,5 millones de dólares).
Portillo vivió en México durante los últimos cuatro años.
Por el caso del desvío ilegal de fondos, un juez penal dejó en libertad condicional a Portillo horas después de que llegara al país.
Asimismo, le concedió una fianza de unos 130.000 dólares por considerar que no existe peligro de fuga.
Según la legislación guatemalteca, el delito de malversación se sanciona con una pena de tres a diez años de prisión y una multa de 66 a 660 dólares.
Los tribunales guatemaltecos conocen desde hace más de cuatro años al menos una decena de procesos judiciales en contra de Portillo, por diversos delitos de corrupción, abuso de autoridad, peculado y estafa, por hechos supuestamente ocurridos durante su administración.