Rebeldes de Osetia del Sur acusan a Georgia de romper el alto al fuego

MOSCÚ.- Separatistas apoyados por Rusia en Osetia del Sur acusaron hoy a las fuerzas georgianas de disparar contra sus soldados en el primer incidente de este tipo registrado tras los breves enfrentamientos bélicos ocurridos en esa región independentista georgiana en agosto.

Un portavoz del ministerio georgiano del Interior confirmó los disparos en un área cerca de la población georgiana de Nikozi, pero añadió que se debió a que soldados rusos borrachos dispararon al aire en un puesto de la frontera.

"El lado georgiano disparó al puesto de seguridad de la República de Osetia del Sur", indicó el gobierno separatista en su sitio web oficial, citando al ministro del Interior de la provincia, Mijail Mindzayev.

No fueron reportadas víctimas a causa del tiroteo, añadió el comunicado.

"Las fuerzas de seguridad de Osetia del Sur, cerca del poblado georgiano de Nikozi, recibieron disparos esta mañana", añadió Mindzayev, pero el ministerio georgiano del Interior da otra versión muy diferente del incidente.

"Soldados rusos dispararon al aire" en un puesto de seguridad cerca de Nikozi, que está localizado en el lado georgiano de la frontera con Osetia del Sur, dijo Shota Utiashvili, portavoz del ministerio.

Es la primera vez que las autoridades de Osetia del Sur reportan un incidente de este tipo desde el conflicto de agosto entre las fuerzas rusas y milicias de Osetia del Sur y las fuerzas georgianas.

Georgia ha informado de varios disparos ocurridos desde Osetia del Sur.

Tras el conflicto con Georgia, Rusia reconoció a Osetia del Sur y a Abajasia, otra provincia separatista de Georgia, como Estados independientes, una acción condenada por los poderes occidentales y Tiflis.

Las tensiones continúan pese al cese el fuego en la región y las autoridades georgianas exigen que Rusia retire todas sus fuerzas de Osetia del sur y Abjasia para cumplir con los acuerdos alcanzados.

Abjasia y Osetia del Sur se separaron de Georgia con el apoyo de Rusia a comienzos de los años 1990 en un conflicto que mató a miles de personas y forzó a cientos de miles de georgianos a huir.