KABUL.- Milicianos extremistas talibán mataron , a 31 civiles en la provincia sur de Kandahar, en Afganistán, informó hoy el Ministerio de Defensa afgano.
El portavoz del Ministerio, el general Sahir Asimi, señaló que los insurgentes detuvieron unos autobuses en el distrito de Maiwand y mataron a 31 pasajeros.
La policía habló de 40 civiles asesinados. Por el contrario, los talibán afirmaron haber matado a 27 soldados afganos después de haberlos "detenido" y sacado de tres autobuses.
El portavoz talibán Kari Yussif Ahmadi afirmó que "todos eran soldados y se dirigían a la provincia de Helmand para apoyar al gobernador".
El general Asimi desmintió a los talibán y dijo que los soldados no viajan en vehículos civiles. "Vuelan o viajan en convoyes militares", subrayó.
El jefe de la policía de Kandahar, Matiullah Chan Kaneh, afirmó que los rebeldes tomaron como rehenes a 50 pasajeros, todos civiles.
De ellos liberaron a 10 y mataron a los 40 restantes. Se encontraron los cadáveres decapitados de seis víctimas.
Kandahar, junto a otras provincias del sur como Helman, Uruzgan y Zabul, son los enclaves desde los cuales los talibán libran sus combates contra las tropas afganas e internacionales.
A menudo los talibán detienen vehículos que se desplazan sobre las autopistas en las regiones del sur y del este del país y arrestan o ejecutan a civiles afganos acusándolos de colaborar con el gobierno o con las tropas internacionales.
En dos atentados diferentes perpetrados contra civiles dos estudiantes y dos maestros fueron asesinados por rebeldes en sus respectivas escuelas de los distritos de Bak y Alishir al sureste de la provinica de Khost, según informó hoy el portavoz provincial, Musa Majro.
Las víctimas en ambos ataques se produjeron cuando dos pistoleros abrieron el fuego en el interior de las escuelas, añadió el portavoz.Por el momento, ningún grupo se adjudicó la responsabilidad por los ataques.
En el pasado, rebeldes talibán realizaron muchos ataques similares sobre establecimienos educativos.
Más de 4000 personas, en su mayoría insurgentes, pero incluídos al menos 1.500 civiles, murieron víctimas de la violencia en Afganistán durante este año, según cifras de Naciones Unidas y fuentes militares.