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Santiago: Lunes 15 de diciembre del 2025 | Actualizado 02:44
WASHINGTON.- Un tribunal de apelaciones de Texas ordenó hoy suspender la ejecución de un hombre que en 1997 secuestró y asesinó a una niña de 11 años, informaron fuentes judiciales.
La ejecución de Bobby Wayne Woods, de 42 años, estaba prevista para esta noche y la suspensión fue ordenada después de que los abogados del condenado presentaron un recurso en el que afirmaron que su cliente es retardado mental, por lo que constitucionalmente no puede ser sometido al castigo.
La de Woods habría sido la segunda ejecución esta semana en Texas, estado que tiene previsto aplicar la pena de muerte a otros dos condenados la próxima semana.
Durante el juicio Woods dijo que no era responsable del secuestro y la muerte de la niña Sarah Patterson y señaló que el culpable era un primo suyo que posteriormente se suicidó.
Añadió que durante el secuestro el hermano de la niña, de nueve años, sufrió lesiones debido a un accidente.La suspensión fue anunciada después de que el Tribunal Supremo de Texas rechazó una apelación similar.
Sin embargo, ante el tribunal de apelaciones los abogados de Woods dijeron que tenían pruebas de que el cociente intelectual de su cliente era tan bajo que ni siquiera entendía el concepto del castigo.
La decisión fue criticada por los fiscales, quienes aseguraron que, por el contrario, Woods tenía un alto nivel intelectual.
"Es el tipo más listo que he conocido y no cumple las normas de retardo intelectual”, señaló Richard Hattox, quien fue uno de los fiscales durante el juicio contra Woods.
