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Paralizan exhumaciones de restos de desaparecidos de la Guerra Civil española

La Audiencia Nacional consideró que las exhumaciones "no son ni urgentes ni necesarias".

07 de Noviembre de 2008 | 14:43 | EFE

MADRID.- La Audiencia Nacional paralizó hoy cautelarmente la apertura de fosas para exhumar los restos de desaparecidos en la Guerra Civil española y la dictadura franquista (1936-1975), proceso que había comenzado con autorización del juez Baltasar Garzón, informaron fuentes jurídicas.


La sala de lo penal del alto tribunal pide a Garzón que paralice las exhumaciones a excepción de las que, "de no realizarse ya, causen un perjuicio irreparable e irreversible al fin de la investigación" hasta que resuelva sobre si el mencionado magistrado es competente para llevar a cabo la investigación.


La Audiencia Nacional consideró al adoptar su decisión que las exhumaciones "no son ni urgentes ni necesarias", según las fuentes jurídicas.


En el caso de que finalmente se llegara a la conclusión de que el juez Garzón no es competente para investigar las desapariciones, todas las actuaciones practicadas en la causa serían declaradas nulas, agregaron.


En su petición, la Fiscalía alegó que las diligencias ordenadas por Garzón podían causar "perjuicios irreversibles de difícil reparación" si la Audiencia Nacional decide que no es competente.


Garzón ya autorizó la apertura de 19 fosas y otro juez de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz, que le sustituye por baja médica, permitió ayer la de otros seis lugares, entre ellos un columbario de la basílica del Valle de los Caídos, en las inmediaciones de Madrid, donde están enterrados el general Francisco Franco y José Antonio Primo de Rivera, fundador de la Falange española, junto a más de 30.000 combatientes de ambos bandos.


Entre las fosas cuya apertura autorizó Garzón está la de Víznar y Alfacar, en Granada, en la que se cree que están enterrados los restos del poeta Federico García Lorca, fusilado al comienzo de la Guerra Civil española.


El magistrado se declaró competente a mediados de octubre para ordenar la investigación tras recibir las denuncias de familiares de desaparecidos, entre ellos la de la nieta de Dióscoro Galindo, un maestro de escuela fusilado junto a García Lorca el 18 de agosto de 1936.