LA HABANA.- Cuba declaró este sábado alarma ciclónica para sus seis provincias de oriente ante la aproximación del huracán "Paloma", que alcanzó la categoría 4 (de un máximo de 5) y según los pronósticos atravesará la isla el domingo.
La fase de alarma ciclónica rige para las provincias de Camagüey, Las Tunas, Holguín, Granma, Santiago de Cuba y Guantánamo, así como en los municipios del sur de la central Ciego de Avila, según la disposición de la Defensa Civil (DC).
Las autoridades locales deben adoptar medidas para la protección de las personas, los recursos económicos y los bienes de la economía familiar, sobre todo en asentamientos costeros, zonas montañosas y áreas de inundación por intensas lluvias, de acuerdo con la Defensa Civil.
El resto del país, bajo las fases de alerta y de información, deben mantenerse atentos a las informaciones del Instituto de Meteorología y cumplir disciplinadamente las orientaciones de la Defensa Civil, agregó el informe.
Paloma, actualmente sobre las islas Caimán, avanza hacia Cuba con vientos sostenidos de 215 kilómetros por hora, y a las 10:30 horas del Meridiano de Greenwich, su ojo se hallaba cerca de la isla Brac Caimán, unos 280 kilómetros al sureste de Camagüey, según el Centro Nacional de Huracanes estadounidense (NHC), con sede en Miami.
En su camino hacia Cuba, la tormenta se movía hacia el noreste a 11 kilómetros por hora, y golpearía la costa central de la isla -posiblemente en las provincias de Ciego de Avila o Camagüey- a última hora del sábado o madrugada del domingo.
Las autoridades de las islas Caimán instaron a la población a mantenerse dentro de sus casas o en refugios; mientras que en Cuba las evacuaciones masivas comenzaron desde el viernes en el centro y oriente del país.
Éste es el tercer huracán de la temporada ciclónica -que concluye el 30 de noviembre- que afecta directamente a Cuba en dos meses, los ciclones "Ike" y "Gustav" arrasaron la isla, dejaron siete muertos y unos 9 mil millones de dólares en pérdidas.
En un artículo publicado este sábado, el líder cubano Fidel Castro, alejado del poder por una grave crisis de salud, rechazó de antemano una posible "piadosa ayuda" de Estados Unidos por "Paloma", y exigió el cese del embargo, al señalar que mantenerlo sería "un error" de los próximos Gobiernos de Washington.