LIMA.- Un equipo de médicos del Estado dijo que el ex Presidente Alberto Fujimori se encuentra en riesgo de sufrir de trombosis, lo que ha obligado al tribunal que lo juzga a regular los horarios de las audiencias del juicio al que es sometido.
El tribunal que juzga a Fujimori conoció hoy el informe preparado por médicos del Instituto de Medicina Legal (IML) que diagnosticaron al ex Mandatario, de 70 años, insuficiencia vascular periférica, hipertensión arterial no controlada, edema de miembros inferiores, además de una gastritis severa y un quiste pancreático.
El informe confirmó un anterior reporte médico divulgado el lunes que señalaba un deterioro de la salud de Fujimori.
Los médicos del IML recomendaron al tribunal que la presión arterial del ex presidente sea vigilada constantemente cada cuatro horas y que no permanezca sentado por más de 90 minutos consecutivos, así como que sean restringidos sus desplazamientos fuera de la sede judicial en la Dirección de Operaciones Especiales de la Policía, donde también se encuentra recluido.
Los galenos señalaron que existe el riesgo de que Fujimori desarrolle trombosis, o coágulos en los vasos sanguíneos.
El lunes se tenía previsto el traslado de Fujimori al juicio de su ex asesor de inteligencia Vladimiro Montesinos, para que declarara como testigo en el caso de la muerte de seis personas y el incendio de una entidad bancaria durante una marcha opositora en 2000, pero tuvo que ser cancelado luego que presentó malestares.
Atendiendo las recomendaciones médicas, el tribunal dispuso que en las audiencias judiciales se cumplan recesos de 20 minutos cada 90 minutos.
Fujimori cumplirá en diciembre un año siendo procesado por delitos de homicidio y secuestro en el caso de las matanzas de Barrios Altos (1991) y La Cantuta (1992), en las que 25 personas fueron asesinadas por un escuadrón de la muerte del ejército. La fiscalía pidió se le impongan 30 años de prisión.
Los allegados del ex Mandatario señalan que las intensas rutinas judiciales están haciendo mella en su salud.
En junio, tuvo que ser intervenido quirúrgicamente para extirpársele una lesión cancerosa en la lengua.