SANTIAGO.- Lo ocurrido en el departamento amazónico de Pando a mediados de septiembre fue una matanza. Esa es la principal conclusión a la que llegó el informe que encargó la Unasur (Unión de Naciones Suramericanas) a una comisión de expertos y que la próxima semana será entregada a la Presidenta Michelle Bachelet en su calidad de presidenta provisional del organismo.
De acuerdo con un adelantado publicado hoy por el diario español El País, decenas de campesinos partidarios del Presidente de Bolivia, Evo Morales, fueron emboscados y tiroteados por civiles sin que las fuerzas del orden ni el prefecto de la zona hicieran nada por impedirlo.
El texto detallará que lo que pasó se enmarca dentro de los enfrentamientos entre el Presidente y los grupos opositores autonomistas. Mientras que los contrarios al Mandatario ocuparon oficinas del Gobierno y el Instituto de Reforma Agraria -donde están depositados los títulos de propiedad de las tierras-, desde Filadelfia, una localidad cercana, se organizó una columna de aproximadamente mil campesinos que iban a asistir a una asamblea en la capital, y previsiblemente, asediar a los ocupantes.
Rodolfo Mattarollo, consultor argentino de derechos humanos y responsable de la comisión, aseguró que "sectores cívicos prefecturales se organizaron para impedir que los campesinos llegaran a la ciudad", detallando incluso que "se cavaron zanjas con excavadoras propiedad del Estado, con varios metros de profundidad".
El periódico asegura que en el informe sobre lo sucedido en Bolivia se dejará establecida la absoluta pasividad de las fuerzas del orden, que contemplaron lo que ocurría sin intervenir.
Mattarollo incluso destacó algunos de los heridos fueron bajados de las ambulancias que los trasladaban al hospital para ser maltratados y golpeados.
"Lo de Pando fue una masacre; ésa es exactamente la palabra indicada porque es así como definen este tipo de hechos los protocolos internacionales", aseguró Mattarollo.
La comisión identificó 26 muertos y más de 40 heridos por armas de fuego, aunque no se descarta que hayan más víctimas. Entre los muertos hay tres jóvenes que fueron claramente ajusticiados y cuyos cadáveres fueron además mutilados.