WASHINGTON.- El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, expresó hoy su consternación por la muerte del diputado hondureño Mario Fernando Hernández, quien fue asesinado el 22 de noviembre junto al abogado Marcio Antonio Collier.
En un comunicado, el máximo responsable de la Organización de Estados Americanos (OEA) condenó el uso de todas las formas de violencia, y expresó su confianza en que este tipo de delitos no alteren las elecciones del próximo 30 de noviembre en Honduras.
Insulza reiteró que sólo el diálogo y la negociación son los mecanismos que deben imperar en la vida política, e instó a la sociedad hondureña a que “erradique la violencia y fortalezca las instituciones y la convivencia democráticas”.
Mario Fernando Hernández, vicepresidente del Congreso Nacional de Honduras, y el abogado Marcio Antonio Collier, ambos miembros del gobernante Partido Liberal, fueron asesinados el pasado 22 de noviembre en San Pedro Sula.
El delito se produjo a ocho días de las elecciones internas que se celebrarán en Honduras para designar a candidatos a presidente, tres vicepresidentes, alcaldes y diputados.
Según el informe preliminar de la Policía Nacional, hombres armados, con su rostro cubierto con pasamontañas, colisionaron sus vehículos con el que conducían las dos víctimas, y dispararon de forma indiscriminada contra Hernández y Collier.
El diputado asesinado y Collier eran activistas del movimiento interno del Partido Liberal que lidera Roberto Micheletti, actual presidente del Parlamento de Honduras, quien ahora busca la candidatura a la presidencia de la República.
Hernández y Collier fueron asesinados cuando se dirigían a una reunión con activistas del populoso barrio Cabañas, de San Pedro Sula, donde tenían previsto celebrar una caminata.
Mario Fernando Hernández buscaba la reelección como diputado ante el poder legislativo por el departamento de Cortés.