Quieres ver tu clima local?
Mostrar
Santiago: Viernes 26 de abril del 2024 | Actualizado 22:21
TAIPEI.- El Presidente taiwanés, Ma Ying-jeou, descartó hoy una posible visita del Dalai Lama a la isla el próximo año, en línea con su actual política de distensión con China.
"No me parece que sea el momento apropiado para la visita", dijo Ma, en conferencia de prensa internacional.
El comentario del Presidente taiwanés responde a las recientes declaraciones del Dalai Lama en las que expresó su interés en realizar su tercer viaje a la isla en 2009.
El Mandatario taiwanés defendió las visitas de dirigentes religiosos, pero señaló que en el caso del Dalai Lama se debe considerar también su relevancia política.
Beijing no vería con buenos ojos el viaje ante las crecientes tensiones con el Dalai Lama y su gobierno tibetano exiliado en el norte de India.
Expertos en la isla señalan que Beijing ha adoptado posturas diferentes ante el Tíbet y Taiwán, negando a los tibetanos la autonomía que se promete a la isla, en caso de que acepte ser parte de China.
Ma resaltó sus planes de intensificar y ampliar los acuerdos de cooperación económica con China, sellados en junio en Beijing y en noviembre en Taipei, por el negociador chino Chen Yunlin y su homólogo isleño, Chiang Ping-kun.
Taipei y Beijing acordaron romper con la prohibición del transporte aéreo y marítimo directo, en vigor desde 1949, y firmaron un acuerdo de seguridad alimentaria.
En las próximas negociaciones las dos partes acordaron incluir un memorando de entendimiento sobre cooperación financiera y Taipei quiere sellar un pacto que proteja los más de cien mil millones de dólares que sus ciudadanos han invertido en China.
El Presidente taiwanés, que tomó posesión de su cargo en mayo de este año, defiende la distensión con China y lograr un mayor espacio de maniobra internacional para la isla.
Un funcionario del gobierno tibetano en el exilio muy cercano al Dalai Lama había declarado el lunes pasado que el dirigente espiritual quería visitar Taiwán en 2009.
El máximo funcionario taiwanés encargado de las relaciones con el Tíbet y Mongolia, Kao Hsi-po, declaró al día siguiente que, aunque le gustaría que la visita del Dalai Lama se realizase, no se podía ocultar que era "políticamente delicada".
