Israel acusó a Hamas de disparar deliberadamente contra civiles.
AFPJERUSALÉN.- Israel, comprometido en una "guerra sin tregua" contra Hamas, bombardeó hoy la Franja de Gaza por tercer día consecutivo, en un conflicto que ya ha causado más de 310 víctimas, 51 de ellas civiles, mientras seguía precisándose la perspectiva de ataques terrestres.
"No tenemos nada contra los habitantes de Gaza, pero estamos comprometidos en una guerra sin tregua contra Hamas y sus aliados", declaró el ministro israelí de Defensa, Ehud Barak, ante la Knesset (Parlamento).
Tras una serie de bombardeos nocturnos, los aviones israelíes efectuaron esta mañana nuevos ataques en la Franja de Gaza, destruyendo la oficina del Primer Ministro del gobierno de Hamas, Ismail Haniye, según testigos.
Durante la noche, un avión israelí había bombardeado la Universidad Islámica de Gaza -considerada como un bastión del movimiento islamista Hamas- y una mezquita en Yabaliya, en el norte del territorio. Cinco niñas de una misma familia, de edades comprendidas entre uno y 12 años, que vivían cerca de la mezquita murieron en este ataque.
Según el último balance anunciado por el jefe de los servicios de urgencias de la Franja de Gaza, Muauiya Hasanein, los ataques aéreos israelíes causaron desde el sábado un total de 312 muertos y 1.420 heridos. La mayoría de los muertos pertenecen a Hamas pero entre ellos figuran también numerosos civiles, incluidos niños.
La ONU, citando cifras obtenidas de fuentes médicas, afirmó que hay 51 civiles entre las víctimas.
"Hemos reunido un balance de víctimas civiles de fuentes médicas y de los hospitales. Se establece en 51 muertos, entre ellos mujeres y niños", dijo Christopher Gunness, portavoz de la UNRWA, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos.
"Lamentamos mucho que haya víctimas civiles, aunque no sean numerosas. No queremos dañar a mujeres, a niños, a hombres; y no impedimos la ayuda humanitaria", aseguró Barak ante la Knesset.
"Luchamos con una ventaja moral. Ellos disparan contra civiles deliberadamente. Nosotros acorralamos a los terroristas y evitamos, en la medida de lo posible, dañar a civiles cuando la gente de Hamas actúa y se esconde intencionadamente en medio de la población", añadió.
Israel lanzó el sábado por la mañana una operación contra Hamas en la Franja de Gaza de una violencia inédita desde la ocupación de los territorios palestinos por Israel en 1967, destinada según afirma a poner fin a los disparos de cohetes contra el sur del país desde este territorio palestino.
El movimiento islamista Hamas controla Gaza desde que en junio de 2007 expulsó a las fuerzas fieles al Presidente palestino Mahmoud Abbas.
Dejando planear la amenaza de una ofensiva terrestre, Israel dio luz verde el domingo a la movilización de 6.500 reservistas, anunció un alto responsable al término de la reunión semanal del gobierno.
Y hoy se desplegaron en la frontera con la Franja de Gaza refuerzos de infantería y carros blindados, según fotógrafos.
Este sector fronterizo fue declarado "zona militar cerrada" por el Ejército israelí, anunció un portavoz militar. Este tipo de medida suele ser el preludio del lanzamiento de operaciones terrestres.
Hamas respondió por su parte con nuevos disparos de cohetes.
En Ashkelon, a unos 13 kilómetros de la Franja de Gaza, un obrero árabe israelí murió y otros ocho civiles resultaron heridos por uno de estos cohetes.
Se trata del segundo muerto civil a causa de los disparos palestinos en Israel desde el inicio de los ataques aéreos.
En un comunicado divulgado en Gaza, el brazo armado de Hamas afirmó haber disparado "cuatro cohetes de tipo Grad" contra Ashkelon. En total, unos 20 cohetes disparados desde Gaza cayeron hoy en el sur de Israel.