NÁPOLES.- La policía italiana confiscó bienes por un valor de 100 millones de euros a empresarios acusados de facilitar las actividades de dos clanes de la camorra (mafia napolitana), informaron hoy fuentes oficiales.
Los agentes incautaron 16 lotes de terrenos y 61 inmuebles ubicados en las provincias de Nápoles (sur del país), Arezzo y Pisa (centro), así como patrimonios empresariales, cuotas de sociedades y automóviles de gran cilindrada, entre otras cosas.
El secuestro se enmarca en el ámbito de una investigación que en mayo de 2008 llevó al arresto de 23 miembros del cuerpo de policía municipal del ayuntamiento de Giugliano, en la sureña región de Campania, tres funcionarios de la oficina técnica del mismo municipio, así como 11 empresarios y dos técnicos de confianza de éstos últimos.
La investigación destapó la existencia de un sistema "endémico y generalizado" de corrupción y vínculos entre sectores del mundo de la empresa de la construcción y numerosas funcionarios públicos del ayuntamiento de Gugliano con tareas de control de las actividades urbanísticas en el terroritorio.
Los empresarios obtenían tratos privilegiados, como el retraso o la omisión de la señalación de un abuso, y por tanto del secuestro, controles amañados o la adopción de medidas ilegítimas: todo ello para facilitar los negocios de los Casalesi y los Mallardo, dos clanes de la camorra.
