CIUDAD DEL VATICANO.- El papa Benedicto XVI lanzó hoy un llamado a las autoridades de Irak para que defiendan los derechos humanos y civiles de los cristianos en ese país.
Joseph Ratzinger dijo que "hombres y mujeres de paz en esta región amada puedan poner en común sus fuerzas para terminar con la violencia y consentir a todos vivir en seguridad y en la comprensión recíproca".
El Papa recordó en particular la violencia que en más de una ocasión golpeó a la Iglesia iraquí. Monseñor Ragheed Aziz Ganni fue asesinado en Mosul el 3 de junio 2007 con tres diáconos, y monseñor Faraj Rahho, arzobispo caldeo de Mosul, fue encontrado muerto el 13 de marzo del 2008.
Ambos, dijo el Papa, son "mártires" y a su recuerdo acompañó un renovado pedido de protección para esos cristianos que en cambio viven "una existencia marcada por la violencia y una creciente marginación social".