BEIJING.— Por lo menos 73 trabajadores murieron, 113 sufrieron heridas y decenas de trabajadores permanecían atrapados en el subsuelo, tras una explosión de gas ocurrida el domingo en una mina carbonífera del norte de China, informaron medios estatales.
Las minas de China son consideradas las más peligrosas del mundo con más de 3.000 fallecimientos al año a consecuencia de incendios, inundaciones y explosiones.
La agencia noticiosa Xinhua informó que la explosión de gas ocurrió antes del amanecer, cuando había 436 trabajadores en la mina carbonífera de Tunlan, perteneciente al Shanxi Jiaomei Group en la ciudad de Gujiao, cerca de Taiyuan, la capital de la provincia de Shanxi.
Por lo menos 73 mineros murieron y otros 113 fueron hospitalizados, 21 de ellos en estado grave, agregó la información de Xinhua.
No se supo de inmediato cuántos trabajadores seguían atrapados en la mina, pero informes preliminares indicaron que al menos 65 seguían al interior de la mina.
La televisión estatal CCTV mostró imágenes de equipos de rescate, con uniformes anaranjados y cascos rojos con lámparas, que ingresaban al elevador de la mina para bajar hacia los túneles de la mina, mientras que otros salían de la misma transportando a trabajadores en camillas y los subían en ambulancias que estaban esperando en el lugar.
Cerca de 100 empleados de rescate estaban en el lugar, pero sus labores eran obstaculizadas por el fuego que aún ardía al interior de la mina, indicó CCTV.
Algunos de los mineros lesionados sufrían intoxicación por monóxido de carbono, informó Xinhua, citando a médicos de un hospital cercano.
La exposición al monóxido de carbono, un gas sin aroma ni color, puede ser mortal.La propietaria de la mina es la empresa Shanxi Jiaomei Group, el mayor productor de coque en China, que se utiliza en la produción de acero. La empresa opera 28 minas.
No se habían registrado accidentes en la mina de Tunlan en la última década, informó Xinhua. La mina produce cinco millones de toneladas de carbón de coque al año.
Aunque las autoridades chinas han tratado de reducir los accidentes de esta actividad productiva al cerrar más de 1.000 minas pequeñas y peligrosas el año pasado, la industria minera del país sigue siendo la más mortífera del mundo.
Unos 3.200 mineros perecieron en accidentes el año pasado, una reducción de 15% respecto del 2007.
