QUITO.- La Policía de Ecuador detuvo ayer viernes a una mujer acusada de traficar armas para la guerrilla colombiana de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y que tenía una orden de captura internacional en su contra emitida en Perú, informó el diario "El Comercio", en su versión de internet.
Gilda Montenegro, de 39 años, acusada de ser una colaboradora de Óliver Solarte, jefe financiero del Frente 48 de las FARC, fue detenida en la ciudad de Nueva Loja, la capital de la provincia amazónica de Sucumbíos, en el noreste de Ecuador y fronteriza con Colombia.
Según "El Comercio", la mujer, de la cual no precisa su nacionalidad, había salido en algunas noticias de prensa, ya que había alquilado su propiedad en Nueva Loja a la empresa colombiana DMG, involucrada en un caso de captación ilegal de dinero del público y de supuesto blanqueo de capitales.
Montenegro, señala el reporte periodístico, tenía un “código rojo” de la Interpol para su captura, solicitada por la justicia peruana.
El Juzgado Tercero de lo Penal de Lima ordenó su prisión, acusada de traficar armas para la guerrilla colombiana, señaló el periódico.
El diario precisó que, entre 2004 y 2006, “la sospechosa formó parte de una organización criminal que reunía armamento en Perú, para luego llevarlo hasta Tumbes y entregarlo a gente” de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.
Según la Policía ecuatoriana, citada por el rotativo, Montenegro fue detenida en Nueva Loja, donde vivía y se prevé que sea trasladada a Quito.
