SANTIAGO, República Dominicana.- Las autoridades de la República Dominicana rastrearon hoy playas del norte y el nordeste del país en busca de un grupo de dominicanos que zarpó el pasado 11 de julio con destino a Puerto Rico.
La Marina de Guerra y miembros de la Defensa Civil concentraron este miércoles la búsqueda en las playas de Nagua y Gaspar Hernández, informaron las autoridades.
A pesar de que fuentes de la Marina de Guerra local aseguran que los desaparecidos son 14, otras fuentes hablan de 26.
María Gómez, quien desistió del viaje pocos minutos antes de que la embarcación zarpara hacia la vecina isla de Puerto Rico, dijo a periodistas que el viaje salió de la playa de Gaspar Hernández y no de la de Nagua como han informado las autoridades.
Indicó que a los pocos minutos de que la embarcación saliera de la playa de Gaspar Hernández, en la provincia Espaillat, comenzó a filtrarse mucha agua en su interior, por lo que, con ayuda de otro viajero decidieron hacerse al mar y salir a la playa.
"Uno de los capitanes nos dijo que no intentáramos lanzarnos al mar porque corríamos el riesgo de ahogarnos o ser devorados por los tiburones, pero en el caso mío me llené de valentía y lo hice porque además de que la embarcación se llenaba constantemente de agua se notaban algunos problemas en el motor", dijo.
Asimismo comentó que otras personas quisieron hacer lo mismo, pero los dos capitanes y otros de los náufragos se los impidieron.La Marina de Guerra en la zona Norte confirmó que la playa partió por la playa de Río Piedra en Gaspar Hernández.
Una parte de los desaparecidos son del municipio de Nagua y otra de la provincia de Hato Mayor.
Algunos de los familiares de los náufragos visitaron hoy el Hospital Regional José María Cabral y Báez, en Santiago, tras recibir informaciones de que habían sido rescatados con vida y que se encontraban internos en ese centro de salud, lo que fue negado por las autoridades del centro de salud.
Según medios locales, algunos de los ocupantes de la embarcación se han comunicado con sus parientes para informar que están varados en una islita próxima a Puerto Rico sin combustible y sin alimentos.
Cada año miles de dominicanos tratan de alcanzar las costas puertorriqueñas para sortear la precaria situación económica en la que viven.
