MANAGUA.- El único gobierno de Honduras que reconoce Estados Unidos es el del depuesto Presidente Manuel Zelaya, según el embajador norteamericano en Honduras, Hugo Llorens, quien este jueves se reunió con él en la capital nicaragüense.
El Gobierno del Jefe de Estado Zelaya, "es el que Estados Unidos reconoce" dijo el diplomático al término de tres horas de reunión con Zelaya en la legación diplomática hondureña en Managua.
Llorens encabeza una delegación del gobierno del Presidente Barack Obama que llegó a Managua para tomar contacto con Zelaya y "tratar nuestros esfuerzos" para el retorno del orden constitucional en Honduras, declaró a la prensa el encargado de negocios de la embajada de Managua, Richard Sanders.
El embajador le informó a Zelaya de la "forma en que está trabajando la comunidad internacional para restaurar la democracia" en Honduras y de la mediación del Presidente costarricense, Óscar Arias, en la crisis política hondureña surgida a raíz del Golpe de Estado del 28 de junio, dijo Sanders.
Zelaya llegó a Managua en la madrugada del jueves desde la ciudad de Ocotal, cercana a la frontera con Honduras, donde ha establecido lo que denomina "resistencia pacífica" contra el gobierno de facto que usurpó el poder.
Zelaya anunció que regresará a Ocotal para continuar recibiendo a "los desplazados" con ayuda humanitaria.
La comitiva de Zelaya estaba integrada por funcionarios de su administración, entre ellos su canciller Patricia Rodas, el secretario de la Presidencia, Enrique Flores y el asesor presidencial, Alan Fajardo.
Estados Unidos suspendió el visado a cuatro altos funcionarios del nuevo gobierno, entre ellos al Mandatario Roberto Micheletti.
La reunión finalizó en un ambiente de cordialidad, según las imágenes transmitidas por el oficialista Canal 4 de televisión de Nicaragua, que mostraron a Zelaya abrazándose y tomando fotos con Llorens y otros miembros de su delegación.
Zelaya dijo estar "complacido" con esta reunión y aseguró que solicitó a Estados Unidos "recrudecer" las sanciones contra el régimen golpista.
Por su parte, su canciller depuesta, Patricia Rodas, agregó que la reunión "no cambia" el panorama político en la crisis hondureña. "Ha sido una reunión de reiteraciones, de posiciones que de ninguna manera pueden ser negociadas. Ellos (los representantes estadounidenses) tampoco vienen con un cambio, ni con una nueva propuesta", dijo Rodas a Telesur.
En opinión del Presidente hondureño, Estados Unidos "está actuando sinceramente" pero consideró que hay conflictos con sectores reaccionarios y viejas élites políticas que están promoviendo a este régimen.
El Presidente depuesto instó a la comunidad internacional que endurezca las sanciones contra el régimen golpista de forma "más enérgica, más fuerte" para revertir el golpe en Honduras.
