NUEVA YORK.- El Primer Ministro turco, Tayyip Erdogan, dijo este sábado que su país presionará al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para discutir la presunta comisión de crímenes de guerra en la Franja de Gaza.
"Definitivamente, tomaremos la postura de discutir este tema en el Consejo de Seguridad", dijo Erdogan a la prensa.
Una misión de la ONU dirigida por el jurista sudafricano Richard Goldstone emitió un reporte la semana pasada que acusó al Ejército israelí y a militantes palestinos de cometer crímenes de guerra, y posiblemente contra la humanidad, durante sus combates entre diciembre y enero en la Franja de Gaza.
El informe instó al Consejo de Seguridad a presentar esta acusación ante la Corte Penal Internacional de La Haya si ni las autoridades palestinas ni israelíes investigan los hechos y procesan a los culpables dentro de seis meses.
Turquía se unió al Consejo de Seguridad de la ONU como miembro temporal en enero y tendrá un asiento hasta fines del 2010. Ambas partes niegan haber cometido crímenes de guerra.
El Premier israelí, Benjamin Netanyahu, calificó el reporte, con el que Israel no quiso cooperar, de una parodia.
La insistencia de Ankara por llevar el tema al consejo podría molestar a Washington, ya que Estados Unidos ha dicho que el tema debe discutirse en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra.
El poder de veto de Estados Unidos en el Consejo de Seguridad hace poco probable que el organismo tome cualquier medida contra Israel, un aliado de Washington. Pero cualquier discusión seria sobre el informe Goldstone en Nueva York podría avergonzar al Estado judío.
Israel y Estados Unidos han criticado por mucho tiempo lo que denominan un enfoque anti-israelí del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, aunque Estados Unidos volvió a unirse este año a él después de que el antecesor del presidente Barack Obama, George W. Bush, lo boicoteara.
Erdogan dijo que Turquía estaba listo para mediar en eventuales conversaciones de Israel y los palestinos, junto a su mediación en las negociaciones indirectas entre Israel y Siria, pero el Estado judío dice que ahora quiere conversaciones directas con Damasco.