KUALA LUMPUR.- Las iglesias cristianas de Malasia que han sido atacadas con bombas incendiarias y pintura en los tres últimos días en acciones vinculadas a la decisión judicial que permite utilizar el término “Alá” también a los no musulmanes, son ocho, informaron hoy fuentes oficiales.
Según el ministro del Interior, Hishammuddin Hussein, el último ataque se produjo ayer en el estado Sarawak, en la parte malasia de la isla de Borneo, donde artefactos incendiarios fueron lanzados contra el muro de una iglesia.
Se trata del primer ataque ocurrido en el este de Malasia, una zona donde los cristianos acostumbran a rezar en el idioma malayo y utilizan el término “Alá” para referirse a Dios.
También ayer dos iglesias fueron atacadas con bombas incendiarias en el estado de Perak, que causaron daños leves, mientras que en Malaca un edificio cristiano amaneció con manchas de pintura negra en su pared principal.
El ministro del Interior aseguró que “todo está bajo control” y acusó a “los medios extranjeros” de exagerar la noticia.
El sábado fue atacada otra iglesia luterana en Kuala Lumpur mientras que el viernes una iglesia protestante fue incendiada y otras dos dañadas, también por la explosión de botellas con combustible, que no causaron heridos.
Los fieles de las iglesias afectadas pudieron ayer asistir a misa sin contratiempos, excepto los parroquianos de Metro Tabernacle, cuya primera planta quedó completamente destrozada por la acción de las llamas tras ser atacada el viernes.
El Primer Ministro de Malasia, Najhib Razak, aseguró después de los primeros ataques que había ordenado a las fuerzas de seguridad ponerles fin, ya que, según dijo, ponían en riesgo la “armonía racial”.