BUENOS AIRES.- En medio del escándalo que enfrenta al Gobierno con el Banco Central (BC) por el uso de reservas monetarias para pagar deudas, Osvaldo Guglielmino renunció anoche al cargo de procurador general del Tesoro de Argentina .
La dimisión se produjo un día después de la exposición que realizó el funcionario ante la comisión parlamentaria que analiza la remoción de Martín Redrado al frente del BC, una medida dictada por el Ejecutivo argentino que posteriormente fue suspendida por la Justicia.
La noticia de la dimisión de Guglielmino se confirmó poco después de que Redrado compareciera ante la comisión bicameral que estudia su destitución, dispuesta por la Presidenta Cristina Fernández, el pasado 8 de enero, luego de que el economista se negara a habilitar 6.569 millones de dólares de las reservas para cancelar compromisos que vencen este año.
Tanto la remoción de Redrado como el uso de reservas monetarias fueron suspendidos por la Justicia, lo que desató un fuerte conflicto institucional y una batalla judicial, aún con final abierto.
Guglielmino, por su parte, participó de la estrategia que delineó el Gobierno para demandar a Redrado ante la Justicia, según indicaron medios locales.
El ahora ex funcionario será reemplazado por el jurista Joaquín Da Rocha, cercano al oficialismo, precisó la agencia estatal Télam.
Osvaldo Guglielmino, considerado el abogado del Estado nacional, había asumido como procurador del Tesoro en agosto de 2004 para hacerse cargo de la defensa de varias causas que afronta el Gobierno, entre ellas los reclamos judiciales realizados ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI).
Ex juez del fuero contencioso administrativo, Guglielmino ganó reconocimiento por su labor para liberar dinero del llamado "corralito" financiero, como se llama a la retención de fondos bancarios que comenzó a aplicarse durante la severa crisis económica de fines de 2001.