TEHERÁN.- Dos manifestantes antigubernamentales, acusados de ser "enemigos de Dios" y de pertenecer a un grupo monárquico, fueron ahorcados este jueves, anunció la agencia ISNA, citando un comunicado del fiscal de Teherán.
Los dos opositores, acusados de ser "mohareb" (enemigos de Dios), fueron condenados a muerte en octubre pasado por su participación en los disturbios consecutivos a la reelección en junio del presidente Mahmud Ahmadinejad, denunciada como fraudulenta por la oposición.
Fueron ejecutados después que la sentencia en primera instancia fuera confirmada en apelación, precisó el comunicado, que identifica a los dos opositores como Mohammed Reza Ali Zammani y Aresh Rahmanipur.
Se trata de los primeros ajusticiamientos de opositores desde las protestas de junio.
El fiscal de Teherán anunció que otros nueve opositores condenados a muerte aguardaban el veredicto del tribunal de apelaciones. "Otros nueve agitadores están aún en proceso de apelación, la sentencia será aplicada de acuerdo con la ley", indicó.
Las autoridades habían anunciado hasta ahora cinco sentencias a la pena capital por las protestas de junio.
Los ahorcados el jueves "estaban acusados de ser "mohareb" haber tratado de derrocar el régimen de la República Islámica, de pertenecer al movimiento contrarrevolucionario de la Asamblea del Reino de Irán y al movimiento terrorista de los monafeghin", precisó el comunicado.
Mohammad Ali Reza Zammani había sido identificado por la oposición como un militante del movimiento monárquico Asamblea del Reino de Irán. La organización de defensa de los derechos humanos Amnistía Internacional había abogado en su favor.
Aresh Rahmanipur, identificado por sus iniciales A.R. al ser condenado, fue acusado de pertenecer al mismo grupo monárquico, indicó su abogada, Nasrin Sotudeh, contactada por la AFP.
Según Sutudeh, Rahmanipur estaba detenido desde dos meses antes de los disturbios de junio, pero se vio "obligado a hacer confesiones, a causa de amenazas contra su familia".
La abogada se declaró "conmocionada" por el anuncio de la ejecución, y aseguró que ni ella ni la familia Tahmanipur habían recibido informaciones oficiales.
