PUERTO PRÍNCIPE.- El abogado haitiano de los diez misioneros cristianos acusados de "secuestro de menores" en Haití, Edwyn Coq, renunció tras ser acusado de haber intentado corromper al juez para que liberara a sus clientes, indicó hoy.
"Los padres de esos estadounidenses no renovaron su compromiso con respecto al trato de pago de mis honorarios", explicó el abogado. "No sólo no me han dado nada hasta ahora, sino que además se permiten manchar mi reputación diciendo que les pedí dinero para corromper al juez", se quejó el letrado.
Coq estaba a cargo hasta ahora de defender a los diez estadounidenses detenidos en Puerto Príncipe el 29 de enero pasado, cuando intentaban cruzar a República Dominicana con 33 niños sin los permisos necesarios.
El jueves, la justicia haitiana los acusó de "secuestro de menores y asociación criminal". Un día después Coq presentó un pedido de libertad condicional que fue rechazado por el juez que escuchó al grupo de estadounidenses.
El abogado aseguró que las familias de los miembros de esta organización bautista basada en Idaho (noroeste de Estados Unidos) le habían prometido pagarle 60.000 dólares de honorarios profesionales.
Coq lamentó no haber recibido ninguna respuesta por parte de las familias, después que el ayer presentó su renuncia a este caso.
Mañana, "un grupo de cinco (integrantes de este grupo) comparecerá ante la corte pero yo voy a advertir al juez que yo no estaré presente", dijo Coq tras indicar que los estadounidenses estarán representados por un abogado público.
El Primer Ministro haitiano, Jean-Max Bellerive, había lamentado la semana pasada que este caso esté acaparando la atención sobre un país donde "hablan más de diez personas que del otro millón que sufre en las calles", tras el terremoto del 12 de enero pasado que dejó más de 200.000 muertos.