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Santiago: Miércoles 24 de abril del 2024 | Actualizado 06:17
LA PAZ.- Dirigentes cívicos de Potosí pidieron ayer, martes, un referendo departamental sobre un posible acuerdo entre Bolivia y Chile sobre el uso de las aguas del Silala, aunque los pobladores de la región en la que nacen ya se pronunciaron a favor.
Segundino Limachi, del Comité Cívico Potosinista, demandó al Gobierno que convoque a la consulta "para que sea el pueblo el que defina con su voto qué utilidad se debe dar a esas aguas".
En declaraciones a radio Aclo, de la red Erbol, Limachi dijo "como Comité Cívico pensamos que la decisión que tome la población será histórica", pues "hay muchas propuestas" respecto a un posible acuerdo que negocian ambos países.
El consejo consultivo del Comité Cívico se reunirá el sábado para analizar las propuestas. Entretanto pidió a los candidatos a gobernador departamental y municipales en las elecciones del 4 de abril "que no usen el tema políticamente".
El viernes pasado, las organizaciones sociales de Quetena Chico, la región en la que nacen las aguas, aprobaron el proyecto negociado a nivel técnico por las cancillerías de ambos países desde hace tres años.
Bolivia y Chile mantienen un diferendo sobre esas aguas que nacen entre los hitos 73 y 74 de su frontera (cerros Silala e Inacaliri) en el cantón Quetena de la provincia Sur Lípez de Potosí, con un caudal de aproximadamente 21,6 millones de litros diarios.
Bolivia reivindica su propiedad total por considerar que son aguas de manantial desviadas mediante canales artificiales hacia Chile en base a un acuerdo firmado entre la prefectura (Gobernación) de Potosí y la empresa chilena The Antofagasta and Bolivia Railway Companyd en 1908.
Según el proyecto que está socializando la Cancillería altiplánica, empresarios del norte chileno pagarán por el 50 por ciento de las aguas que utilizan hasta definir, en cuatro años, si son de manantial como sostiene Bolivia o son de uso compartido por ser de río de curso sucesivo como dice Chile.
Aunque las organizaciones campesinas de Quetena aprobaron el proyecto, los dirigentes cívicos de Potosí tienen algunas observaciones, entre ellas la demanda de un compromiso de pago por parte de Santiago de una deuda histórica de 100 años por el uso exclusivo de las aguas.
