KANSAS.- Un mexicano que dijo que sólo quería ayudar a su familia después de que lo descubrieran transportando a indocumentados fue sentenciado el lunes al tiempo que ya había pasado en la cárcel y se ordenó su deportación.
Joni Rivera Rodríguez había permanecido bajo custodia desde noviembre, cuando lo descubrieron en Kansas conduciendo una camioneta de pasajeros con 16 inmigrantes ilegales de México, El Salvador, Guatemala y Honduras. Se declaró culpable en febrero de traficar y albergar indocumentados.
Rivera pidió entre lágrimas que lo perdonaran y le dijo en español al juez federal de distrito Monti Belot que había cometido una falta sin saber y que nunca pensó en ese momento que se trataba de algo tan malo.
Siete de los inmigrantes que iban en la camioneta con Rivera se han declarado culpables de reingresar ilegalmente a Estados Unidos después de ser deportados. Todos fueron sentenciados al tiempo que han permanecido detenidos y también se ordenó su deportación.
El vicefiscal federal Brent Anderson dijo el lunes que el caso de Kansas está relacionado con la Operación Movimientos Nocturnos, una investigación federal sobre tráfico de inmigrantes en negocios de transporte de Houston. Anderson rechazó proporcionar otros detalles al respecto.
Según el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) la investigación ha llevado al arresto de 209 personas desde noviembre.
El servicio emitió nueve órdenes de cateo a negocios de transporte de Houston el mes pasado y acusó a los propietarios y gerentes de utilizar sus negocios para transportar inmigrantes que recién han cruzado ilegalmente la frontera hacia Estados Unidos.
