WASHINGTON.- El Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, está "profundamente entristecido e indignado por el brutal asesinato" de tres personas relacionadas con el consulado estadounidense en Ciudad Juárez, dijo hoy un portavoz en Washington.
El vocero del Consejo de Seguridad Nacional, Mike Hammer, condenó en un comunicado la muerte de una empleada del consulado y de su esposo, ambos estadounidenses, así como del esposo de una empleada mexicana de la dependencia diplomática.
Sin dar detalles sobre cómo ocurrieron los hechos, Hammer dijo que Obama expresa sus condolencias a las familias e indicó que junto con las autoridades mexicanas Estados Unidos trabajará "sin descanso" para llevar a los asesinos ante la Justicia.
"El presidente comparte la indignación del pueblo mexicano por el asesinato de miles de personas en Ciudad Juárez y en otras partes de México", dijo Hammer.
"Vamos a seguir trabajando con el Presidente mexicano Felipe Calderón y su gobierno para romper el poder de las organizaciones del narcotráfico que operan en México y que con demasiada frecuencia tienen como objetivo y matan a inocentes", agregó.
En Ciudad Juárez se informó de manera extraoficial que los ataques ocurrieron la tarde del sábado en dos hechos por separado, pero casi simultáneos, que estaban dirigidos directamente contra los fallecidos.
El primero ocurrió a las 14:18 locales (20:18 GMT). Ahí murieron la mujer y el hombre estadounidenses, que fueron tiroteados cuando iban en una camioneta por el centro de la ciudad.
Tres minutos después, a las 14:21, murió un hombre, señalado como esposo de una empleada mexicana del consulado de Estados Unidos. El ataque ocurrió también cuando circulaba en un vehículo por calles de la ciudad.
Ciudad Juárez, ubicada en la frontera entre México y Estados Unidos frente a la ciudad de El Paso, es la localidad más violenta de México, con 2.600 asesinatos el año pasado atribuidos al crimen organizado sobre unos 7.000 cometidos en todo el país.
El Presidente de México, Felipe Calderón, viajará el martes a la ciudad para dar continuidad a la estrategia "Todos somos Juárez. Reconstruyamos la ciudad", puesta en marcha en febrero para educir los niveles de violencia y mejorar las condiciones de vida.
