SEÚL.- El Ministerio de Asuntos Exteriores de Japón afirmó que no indemnizará a víctimas individuales de Corea del Sur que sufrieron las consecuencias de la ocupación colonial japonesa de principios del siglo XX, según informó hoy la agencia Yonhap.
Esto contradice lo acordado en 1965 entre ambos países, según un documento desclasificado recientemente por el gobierno japonés, en el que se reconocía la legitimidad de las víctimas de trabajos forzados para obtener compensaciones a título individual.
Pero, según dijo el Ministerio de Exteriores a Yonhap, no está claro a qué se refiere exactamente ese documento desclasificado.
Durante la ocupación colonial japonesa de Corea del Sur, entre 1910 y 1945, miles de coreanos fueron forzados a trabajar sirviendo en el frente de guerra o como esclavas sexuales de los militares, entre otros vejámenes.
En 1965 las dos naciones firmaron un tratado bilateral que establecía vínculos diplomáticos y el pago de lo que Tokio considera que son remuneraciones por sueldos no pagados por trabajos forzados.
Japón alega que en el documento desclasificado, el pacto de 1965 sólo cubre compensaciones a nivel gubernamental, no individual.
Sin embargo, Choi Bong-Tae, abogado de una de las víctimas coreanas, citado por la agencia de noticias, afirma lo contrario: "Este documento revela lo que pensaba el gobierno japonés en el momento de establecer el pacto; Japón debe desclasificar todos los documentos sobre las negociaciones del tratado (de 1965)".
Sin embargo, las reclamaciones individuales serán rechazadas, según informó el Ministerio de Exteriores japonés a la agencia, fijando de este modo, por primera vez desde 1992, la posición de su país acerca de las víctimas de la ocupación colonial.
Este último roce diplomático entre ambos países se remonta a un caso de diciembre de 2009, cuando siete mujeres coreanas recibieron una indemnización de 99 yenes (un dólar) por casi una década de trabajos forzados.