BEIJING.-El Presidente chino, Hu Jintao, viajó esta mañana a la zona afectada por el terremoto, que ha dejado al menos 1.484 muertos, más de 12.000 heridos y 312 desaparecidos, informó la agencia oficial Xinhua.
Hu llegó ayer por la tarde a Beijing tras suspender en Brasil su visita a Venezuela y Chile.
El pasado jueves en Brasilia, a donde se dirigió tras la cumbre de seguridad nuclear de Washington para participar en una cumbre con los líderes de Brasil, Rusia y India (BRIC), el Presidente chino decidió cancelar su gira latinoamericana.
Un portavoz del cuartel de servicios de rescate destacó que hay "12.088 heridos, de los cuales 1.394 se encuentran en estado grave”.
Según la última información de la agencia oficial, los equipos de rescate han salvado a 17.000 personas que permanecían atrapadas entre los escombros.
El epicentro del terremoto se localizó hace cinco días, a una profundidad de 33 kilómetros en una zona situada a 33,1 grados latitud norte y 96,7 grados longitud este en el distrito de Yushu, en la provincia autónoma tibetana del mismo nombre.
Pero llegar a Yushu, situado a unos 800 kilómetros de Xining, capital provincial, resulta difícil, ya que pocos aviones pueden aterrizar en el aeropuerto local, y las tormentas de arena entorpecen la circulación de los camiones hasta la zona afectada, motivo por el cual los alimentos, el agua potable, las tiendas de campaña, las mantas y la ropa escasean.
Por eso todavía muchos de los supervivientes continúan pasando las noches a la intemperie con unas temperaturas mínimas de tres grados bajo cero.
Por otro lado, los grupos de rescate también intentan hacer frente a las malas condiciones meteorológicas y a la falta de oxígeno, y al menos 200 personas pertenecientes a los equipos de salvamento han tenido que abandonar la misión por sufrir mal de altura.
Se trata del seísmo más grave ocurrido en China desde mayo de 2008, cuando un terremoto de 8 grados azotó la provincia de Sichuan, causando unos 90.000 muertos.
