ISLAMABAD.- Un atentado con coche bomba contra un cuartel policial en el noroeste de Pakistán dejó -en la mañana de hoy domingo- al menos tres muertos.
El ataque contra la estación policial de Saddar, en la ciudad de Kohat, se produce un día después de que dos atentados suicidas causaran la muerte de al menos 41 personas en un campamento de refugiados cercano, donde viven personas que huyen de los enfrentamientos entre los talibanes y el ejército paquistaní.
Los ataques confirman la persistente amenaza que representan los insurgentes islamistas, pese a las ofensivas del ejército paquistaní y los crecientes ataques de aviones teleguiados estadounidenses contra dirigentes talibanes.
Los ataques del sábado dan cuenta de la amenaza constante de los insurgentes islamistas, a pesar de las ofensivas que realiza el ejército paquistaní, al que se le han sumado el respaldo de aviones teleguiados estadounidenses.