MANAGUA.- El ejército confirmó el sábado que interceptó varias embarcaciones colombianas y capturó a 25 pescadores que las tripulaban, en aguas del país centroamericano.
El jefe de la Fuerza Naval, capitán de Navío Róger González Díaz, dijo a los periodistas en una conferencia de prensa que los 25 colombianos pescaban el viernes “en territorio nicaragüense”.
González Díaz dijo que fueron arrestados además cinco pescadores originarios de Gran Caimán y uno nicaragüense.
Veintitrés de los marinos colombianos tripulaban el pesquero “Laura Anny”, capturado 217 kilómetros (135 millas) al noreste de Cabo Gracias a Dios, fronterizo con Honduras. Dos colombianos más tripulaban el bote pesquero, Rex Tail, interceptado 75 kilómetros (47 millas) al noreste de la isla de Corn, bajo dominio de Nicaragua.
En otra lancha identificada como Khaterine, capturada 312 kilómetros (194 millas) al noreste de Cabo Gracias a Dios, fueron arrestados cinco tripulantes originarios de Gran Caimán.
González Díaz agregó que las embarcaciones partieron de la Isla de San Andrés, bajo dominio colombiano, pero que Nicaragua reclama como suya. Descartó que las naves realizaran actividades de narcotráfico.
El ministro de Defensa, colombiano, Gabriel Silva, informó el viernes que autoridades nicaragenses interceptaron una embarcación colombiana en labores de pesca en una zona en litigio entre ambos países.
Explicó que el incidente ocurrió en cercanías a Serranilla, una pequeña isla en el litoral Caribe a unos 1.460 kilómetros al noroeste de Bogotá y sobre la cual reclaman soberanía los gobiernos de Colombia y Nicaragua.
La embarcación con bandera colombiana estaba “en esa zona y un barco de la armada nicaragense lo interceptó y lo está remolcando hacia aguas nicaragüenses”, declaró el ministro tras participar en una ceremonia militar en Bogotá.
“Estamos identificando las coordenadas precisas para saber en que punto ocurrió y si se llega a confirmar que efectivamente fue un acto en aguas internacionales, nuestra recomendación a la cancillería sería enviar una protesta inmediata y firme”, agregó.
Silva recordó que el área fue declarada “zona de litigio” por la Corte Internacional de Justicia (CIJ) y como “no ha sido asignada (a ningún país) por lo tanto, es altamar desde el punto de vista jurídico... y cualquier barco tiene derecho a navegar por allí”.
La CIJ tramita desde el 2001 un diferendo marítimo y territorial que fue puesto a su consideración por el país centroamericano.
En 2007, el alto tribunal de la Organización de las Naciones Unidas se pronunció y ratificó la soberanía de Colombia sobre las islas de San Andrés, Providencia y Santa Catalina.
No obstante, señaló que ni la soberanía de otras islas del archipiélago -entre ellas Serranilla-, ni la frontera marítima estaban determinadas y en consecuencia, aún son objeto de estudio.
