BUENOS AIRES.- La declaración de inconstitucionalidad de un indulto que en 1990 favoreció al ex ministro de Economía José Martínez de Hoz, ideólogo de la dictadura, abre las puertas a juzgar a los cómplices civiles del régimen, dijo el ministro de Justicia, Julio Alak.
El fallo "abre la puerta a un nuevo camino para la definitiva recuperación de la memoria, porque ya es hora de juzgar y condenar la complicidad civil con el última régimen militar", señaló.
"Martínez de Hoz fue el brazo ejecutor de un modelo económico que, ensangrentado con la muerte y la desaparición de 30.000 argentinos, se apropió de la riqueza nacional, cuyas consecuencias, como la deuda externa y la exclusión social, constituyen una pesada herencia para la consolidación de la democracia", insistió.
El ministro saludó así un fallo del martes de la Corte Suprema de Justicia, que anuló los indultos que favorecieron a Martínez de Hoz y al ex dictador Jorge Videla en una causa por la detención ilegal durante cinco meses, entre 1976 y 1977, de Federico Gutheim y de su hijo Miguel, dueños de una empresa textil.
Por esta causa, Videla, Martínez de Hoz y el ex ministro del Interior Albano Harguindeguy habían sido procesados en 1988, pero dos años después fueron indultados por el ex presidente Carlos Menem (1989/99) antes de sentarse ante un tribunal que dicte sentencia.
Según Alak, el fallo de la Corte "era esperado por todos los argentinos, porque el pueblo sabe que el genocidio llevado a cabo por la dictadura militar tenía intereses económicos y financieros como ideólogos y beneficiarios".
Con la decisión del alto tribunal, el ex ministro de Economía quedó a un paso de ser detenido, pero la sentencia no modifica la situación de Videla, quien ya está preso por graves violaciones a los derechos humanos.
Unas 1.500 personas están acusadas de crímenes de lesa humanidad, la mayoría militares e integrantes de fuerza de seguridad, en 320 causas judiciales abiertas en Argentina desde la anulación en 2003 de leyes de amnistía.