BANGKOK.- El gobierno de Tailandia se reunió hoy de urgencia para analizar la crisis política que afronta el país y decidió no declarar la ley marcial solicitada por sus adherentes, con el fin de terminar con dos meses de protestas antigubernamentales.
"Decidí las medidas a tomar, pero antes debo asegurarme que puedan tener éxito con el menor efecto negativo posible", sostuvo el Primer Ministro, Abhisit Vejjajiva.
La reunión fue convocada en la base militar, sitio donde se estableció el gobierno a mediados marzo, luego que el grupo Camisas Rojas iniciara las protestas en las calles para reclamar la renuncia de Vejjajiva.
El Jefe del Gobierno, explicó además que el Consejo de Ministros emitirá "nuevas leyes y reglas para las fuerzas de seguridad" y prometió medidas severas que provoquen la "menor cantidad de consecuencias negativas posibles".
Finalmente la máxima autoridad política reiteró a los manifestantes que deben cesar las protestas, mientras un portavoz del ejército dijo que las fuerzas de seguridad se aprestan a retomar el control en el distrito comercial de Bangkok.