Fernando de la Rúa debió renunciar a la presidencia de Argentina, en medio de una de las peores crisis económicas que ha registrado el país en su historia.
EFE
BUENOS AIRES.- El ex presidente argentino Fernando de la Rúa afirmó hoy que la principal diferencia entre la crisis griega y la que lo hizo renunciar a él a la jefatura de estado en diciembre de 2001, es la asistencia que recibe Atenas, mientras que al país sudamericano lo "empujaban a la caída".
"La gran diferencia es que con Argentina en 2001 había voluntad del FMI de dar ejemplo de rigor y tirarnos a la zanja. En cambio con Grecia se han dado cuenta que esas teorías del llamado 'riesgo moral' no sirven, porque tienen un efecto arrastre terrible. Se dieron cuenta de que lo que hicieron en 2001 fue un desastre, una inequidad", analizó De la Rúa en declaraciones a radio Continental de Buenos Aires.
"Nos empujaban a la caída negándonos el pago de una cuota de menos de 1.000 millones de dólares que nos correspondían", mientras que a Grecia la "asisten con 146 mil millones de dólares", señaló el ex mandatario, quien renunció cuando le faltaban dos años para completar su mandato.
De la Rúa subrayó que "lo que hay que tomar de lección es la experiencia de no empujar a los países a la caída".
En Argentina se combinaron en 2001 varios factores, según estimó el es mandatario, entre ellos una "conspiración" de la oposición, que tenía el control del Parlamento, además de "el FMI en contra por capricho del director gerente y la señora Anne Krueger", entonces directiva del Fondo Monetario Internacional (FMI) a cargo de las negociaciones con Buenos Aires.
"Fuimos víctimas de una operación de pinzas del FMI, y el justicialismo quería apropiarse del poder", señaló De la Rúa, quien llegó en 1999 a la Casa Rosada al frente de la Alianza entre la Unión Cívica Radical y el partido de centroizquierda Frepaso.
Aseguró en tanto que las causas del estallido de la crisis en Argentina se dieron desde antes de su asunción, porque le entregaron "el gobierno en un cuadro de alto endeudamiento, enorme déficit, y mucha recesión, a lo que se sumaba una crisis internacional, un enfriamiento de la economía".
Apuntó en ese sentido a su antecesor, el peronista Carlos Menem (1989-1999), por no haber abandonado el sistema de convertibilidad monetaria, que ataba el valor de un peso a un dólar, "cuando la economía lo permitió", y por haber aumentado el gasto público.
De la Rúa renunció a la presidencia argentina el 20 de diciembre de 2001, en medio de un estallido social que dejó un saldo de unos 28 muertos y numerosos heridos. Según aseguró hoy el ex presidente, "realmente la crisis es la de 2002, más que la de 2001", aunque admitió que debió haber encontrado la forma de evitarla.
Tras su renuncia pasaron en menos de dos semanas otros tres mandatarios interinos, hasta que la Asamblea Legislativa eligió al peronista Eduardo Duhalde para completar el mandato de De la Rúa. Entre sus primeras medidas estuvo la devaluación del peso, poniendo fin a casi diez años de convertibilidad monetaria.