Veronica Lario no sólo querría una cuantiosa pensión alimenticia, sino además asegurar la participación de sus hijos en las empresas de Berlusconi.
APROMA.- El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, está cerca de llegar a un acuerdo de separación con su esposa, Veronica, quien solicitó el divorcio tras acusarlo de salir con una chica de 17 años, reportaron diarios italianos.
La pareja y sus abogados pasaron casi cinco horas en una corte en Milán el sábado, dijeron los reportes el domingo.
"Estamos cerca de llegar a un acuerdo", dijeron fuentes legales tras la reunión citadas por la agencia Ansa, aunque sin dar detalles.
Los diarios italianos publicaron que Veronica Lario, que había solicitado inicialmente una pensión alimenticia mensual de 3,5 millones de euros (4,7 millones de dólares), parecía lista para reducir sus demandas después de que Berlusconi acordase dejarla conservar una lujosa villa cerca de Milán. La oferta inicial de su marido llegaba a 300 mil euros.
Aún debe resolverse un acuerdo para los tres hijos de la ex pareja y su posible rol futuro en el imperio empresarial de Berlusconi. El abogado del primer ministro no estuvo disponible inmediatamente para hacer declaraciones.
Veronica, de 53 años, anunció en mayo del año pasado a los diarios su intención de divorciarse del multimillonario devenido en político, después de que se conociera que Berlusconi había asistido a la fiesta de cumpleaños de 18 años de una aspirante a modelo en Nápoles.
Lario declaró que ya no podía estar junto a un hombre "que frecuenta menores".
Berlusconi, de 73 años, ha negado repetidamente estar involucrado con la joven napolitana, pero se implicó posteriormente en otro escándalo cuando una prostituta dijo que había tenido relaciones sexuales con el mandatario y que recibió pagos por ir a fiestas en la residencia de Roma del primer ministro. Berlusconi sólo respondió que nunca ha pagado por sexo.
Bajo la legislación italiana, el procedimiento de divorcio sólo puede iniciarse tres años después de que se llega a un acuerdo de separación.
El primer ministro, el segundo hombre más rico de Italia, tiene tres hijos con Veronica, de 25, 23 y 21 años de edad. Pero son los dos hijos de su primer matrimonio los que tienen roles más importantes en su imperio de medios. Su hijo Piersilvio es vicepresidente del grupo audiovisual Mediaset, mientras que su hija Marina encabeza el holding Fininvest y el brazo editorial Mondadori.