BEIJING.- El jefe de inspectores del Ministerio de Comercio chino, Guo Jingyi, fue condenado a muerte por aceptar sobornos, algunos de ellos procedentes de empresas extranjeras, informó la agencia oficial de noticias Xinhua.
El alto cargo recibió la sentencia en el Tribunal Popular Intermedio Número 2 de Beijing, que también le confiscó sus propiedades y le privó de derechos políticos de por vida.
La condena a muerte, no obstante, fue dictada con dos años de suspensión, lo que significa que la pena podría ser conmutada a cadena perpetua pasado ese tiempo si el reo muestra buena conducta.
Guo, de 44 años, fue hallado culpable de haber aceptado sobornos por valor de 8,44 millones de yuanes (1,24 millones de dólares).
El condenado comenzó a trabajar en la institución estatal en 1986, cuando ésta llevaba el nombre de Ministerio de Comercio Exterior y Cooperación Económica, y ocupó varios altos cargos, como el de subdirector del departamento de tratados y leyes o el de "número dos" del buró de investigaciones antimonopolio.
Según los jueces, Guo se aprovechó de sus distintos cargos entre 1998 y 2007 para amasar riquezas a cambio de aprobar cambios en los derechos de accionistas de ciertas empresas, así como fusiones y adquisiciones de compañías extranjeras.
La nota oficial no detalló que empresas del exterior sobornaron a Guo para obtener beneficios en el mercado chino.
