KABUL.- Milicianos talibanes atacaron una conferencia nacional de paz que se iniciaba el miércoles en la capital afgana, provocando enfrentamientos armados a las afueras de la cumbre.
Dos milicianos murieron y uno fue capturado. Ninguno de los delegados que asistían al encuentro resultó herido, dijo un funcionario.
El ataque, que según reportes incluyó misiles, empezó minutos después de que el presidente Hamid Karzai iniciara el discurso de apertura ante unos 1.600 delegados en la cumbre, conocida como una jirga de paz, celebrada en una carpa gigante en un complejo universitario.
El Talibán, que había amenazado con matar a quien participara en la conferencia, se adjudicó la responsabilidad por el ataque a través de una llamada telefónica, en la que dijo sabotearía la cumbre de tres días.
Karzai tenía la esperanza de que la jirga, que continuó a pesar del ataque, refuerce su posición política al apoyar su estrategia de ofrecer incentivos a ciertos milicianos talibanes y de acercamiento con el liderazgo de la insurgencia.
Sin embargo, el ataque evidenció la debilidad del gobierno de Karzai ante la insurgencia talibana que ha incrementado su fuerza, a pesar de la creciente presencia de soldados estadounidenses en el país.
Karzai hizo un llamado a El Talibán, señalando que las acciones del grupo están haciendo que las fuerzas extranjeras que desprecian se queden en el país.
"Deberían dar la oportunidad para que las fuerzas extranjeras se vayan", dijo Karzai en la conferencia.
"Hagan las paces conmigo y aquí no habrá necesidad de extranjeros. Mientras no hablen con nosotros, no trabajen por la paz con nosotros, no dejaremos que se vayan los extranjeros".
Cuando el presidente llevaba unos 10 minutos hablando, fue interrumpido por las explosiones afuera del recinto. La policía dijo que había sido un misil.
Farooq Wardak, un ministro del gobierno encargado de organizar la jirga, dijo que tres milicianos vestidos con burqas y cargando explosivos, armas y al menos un lanzador de granadas, participaron en el ataque. Agregó que dos murieron y uno fue capturado.
Kamaluddin, un policía que sólo usa un nombre, dijo que un atacante suicida detonó una bomba a unos cuantos metros de la carpa, pero otros funcionarios no confirmaron la información de inmediato.
El vocero de El Talibán, Zabiullah Mujahid, proporcionó una versión un poco distinta del ataque. Indicó que un grupo de cuatro atacantes suicidas, que llevaban uniformes del Ejército afgano, abrieron fuego en un intento por "sabotear y destruir esta jirga de paz".
